La misión de Dios en favor de nosotros: Primera parte — Estudia la Biblia Hoy





1/13          30 - 47 minutes
La misión de Dios en favor de nosotros: Primera parte
La misión de Dios en favor de nosotros: Primera parte
La misión de Dios en favor de nosotros: Primera parte



Click me to expand

 CONTENIDO 

La misión de Dios en favor de nosotros: Primera parte

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA

Génesis 3:9-15
RVR1960 9 Mas Jehová Dios llamó al hombre, y le dijo: ¿Dónde estás tú? 10 Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba desnudo; y me escondí. 11 Y Dios le dijo: ¿Quién te enseñó que estabas desnudo? ¿Has comido del árbol del que yo te mandé no comieses? 12 Y el hombre respondió: La mujer que me diste por compañera me dio del árbol, y yo comí. 13 Entonces Jehová Dios dijo a la mujer: ¿Qué es lo que has hecho? Y dijo la mujer: La serpiente me engañó, y comí. 14 Y Jehová Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo; sobre tu pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida. 15 Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; esta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar. NTV 9 Entonces el Señor Dios llamó al hombre: — ¿Dónde estás? 10 El hombre contestó: — Te oí caminando por el huerto, así que me escondí. Tuve miedo porque estaba desnudo. 11 — ¿Quién te dijo que estabas desnudo? — le preguntó el Señor Dios — . ¿Acaso has comido del fruto del árbol que te ordené que no comieras? 12 El hombre contestó: — La mujer que tú me diste fue quien me dio del fruto, y yo lo comí. 13 Entonces el Señor Dios le preguntó a la mujer: — ¿Qué has hecho? — La serpiente me engañó — contestó ella — . Por eso comí. 14 Entonces el Señor Dios le dijo a la serpiente: «Por lo que has hecho, eres maldita más que todos los animales, tanto domésticos como salvajes. Andarás sobre tu vientre, arrastrándote por el polvo durante toda tu vida. 15 Y pondré hostilidad entre tú y la mujer, y entre tu descendencia y la descendencia de ella. Su descendiente te golpeará la cabeza, y tú le golpearás el talón».
Génesis 28:15
RVR1960 15 He aquí, yo estoy contigo, y te guardaré por dondequiera que fueres, y volveré a traerte a esta tierra; porque no te dejaré hasta que haya hecho lo que te he dicho. NTV 15 Además, yo estoy contigo y te protegeré dondequiera que vayas. Llegará el día en que te traeré de regreso a esta tierra. No te dejaré hasta que haya terminado de darte todo lo que te he prometido».
Éxodo 29:43-45
RVR1960 43 Allí me reuniré con los hijos de Israel; y el lugar será santificado con mi gloria. 44 Y santificaré el tabernáculo de reunión y el altar; santificaré asimismo a Aarón y a sus hijos, para que sean mis sacerdotes. 45 Y habitaré entre los hijos de Israel, y seré su Dios. NTV 43 Me reuniré allí con el pueblo de Israel, en el lugar que se hace sagrado por mi gloriosa presencia. 44 Así es, consagraré el tabernáculo y el altar, y consagraré a Aarón y a sus hijos para que me sirvan como sacerdotes. 45 Entonces viviré en medio de los israelitas y seré su Dios,
Mateo 1:18-23
RVR1960 (Lc. 2.
1-7) 18 El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo. 19 José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente. 20 Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es. 21 Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. 22 Todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho por el Señor por medio del profeta, cuando dijo: 23 He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros.
NTV 18 Este es el relato de cómo nació Jesús el Mesías. Su madre, María, estaba comprometida para casarse con José, pero antes de que la boda se realizara, mientras todavía era virgen, quedó embarazada mediante el poder del Espíritu Santo. 19 José, su prometido, era un hombre justo y no quiso avergonzarla en público; por lo tanto, decidió romper el compromiso en privado. 20 Mientras consideraba esa posibilidad, un ángel del Señor se le apareció en un sueño. «José, hijo de David — le dijo el ángel — , no tengas miedo de recibir a María por esposa, porque el niño que lleva dentro de ella fue concebido por el Espíritu Santo. 21 Y tendrá un hijo y lo llamarás Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados». 22 Todo eso sucedió para que se cumpliera el mensaje del Señor a través de su profeta: 23 «¡Miren! ¡La virgen concebirá un niño! Dará a luz un hijo, y lo llamarán Emanuel, que significa “Dios está con nosotros”».
Juan 1:14-18
RVR1960 14 Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad. 15 Juan dio testimonio de él, y clamó diciendo: Este es de quien yo decía: El que viene después de mí, es antes de mí; porque era primero que yo. 16 Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia. 17 Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo. 18 A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer. NTV 14 Entonces la Palabra se hizo hombre y vino a vivir entre nosotros. Estaba lleno de amor inagotable y fidelidad. Y hemos visto su gloria, la gloria del único Hijo del Padre. 15 Juan dio testimonio de él cuando clamó a las multitudes: «A él me refería yo cuando decía: “Alguien viene después de mí que es muy superior a mí porque existe desde mucho antes que yo”». 16 De su abundancia, todos hemos recibido una bendición inmerecida tras otra. 17 Pues la ley fue dada por medio de Moisés, pero el amor inagotable de Dios y su fidelidad vinieron por medio de Jesucristo. 18 Nadie ha visto jamás a Dios; pero el Único, que es Dios, está íntimamente ligado al Padre. Él nos ha revelado a Dios.
Juan 3:16
RVR1960 16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. NTV 16 »Pues Dios amó tanto al mundo que dio a su único Hijo, para que todo el que crea en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.
Juan 14:1-3
RVR1960 1 No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. 2 En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. 3 Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis. NTV 1 »No dejen que el corazón se les llene de angustia; confíen en Dios y confíen también en mí. 2 En el hogar de mi Padre, hay lugar más que suficiente. Si no fuera así, ¿acaso les habría dicho que voy a prepararles un lugar? 3 Cuando todo esté listo, volveré para llevarlos, para que siempre estén conmigo donde yo estoy.

VERSÍCULO DE MEMORIA

Efesios 1:9-10
RVR1960 9 dándonos a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, el cual se había propuesto en sí mismo, 10 de reunir todas las cosas en Cristo, en la dispensación del cumplimiento de los tiempos, así las que están en los cielos, como las que están en la tierra. NTV 9 Ahora Dios nos ha dado a conocer su misteriosa voluntad respecto a Cristo, la cual es llevar a cabo su propio buen plan. 10 Y el plan es el siguiente: a su debido tiempo, Dios reunirá todas las cosas y las pondrá bajo la autoridad de Cristo, todas las cosas que están en el cielo y también las que están en la tierra.

SÁBADO — INTRODUCCIÓN

La misión encuentra su origen y su finalidad únicamente en Dios. Esta misión no comenzó con el llamado a Abram Génesis 12:1-4
RVR1960 1 Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. 2 Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. 3 Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra. 4 Y se fue Abram, como Jehová le dijo; y Lot fue con él. Y era Abram de edad de setenta y cinco años cuando salió de Harán. NTV 1 El Señor le había dicho a Abram: «Deja tu patria y a tus parientes y a la familia de tu padre, y vete a la tierra que yo te mostraré. 2 Haré de ti una gran nación; te bendeciré y te haré famoso, y serás una bendición para otros. 3 Bendeciré a quienes te bendigan y maldeciré a quienes te traten con desprecio. Todas las familias de la tierra serán bendecidas por medio de ti». 4 Entonces Abram partió como el Señor le había ordenado, y Lot fue con él. Abram tenía setenta y cinco años cuando salió de Harán.
ni con el Exodo Éxodo 12:31-42
RVR1960 31 E hizo llamar a Moisés y a Aarón de noche, y les dijo: Salid de en medio de mi pueblo vosotros y los hijos de Israel, e id, servid a Jehová, como habéis dicho. 32 Tomad también vuestras ovejas y vuestras vacas, como habéis dicho, e idos; y bendecidme también a mí. 33 Y los egipcios apremiaban al pueblo, dándose prisa a echarlos de la tierra; porque decían: Todos somos muertos. 34 Y llevó el pueblo su masa antes que se leudase, sus masas envueltas en sus sábanas sobre sus hombros. 35 E hicieron los hijos de Israel conforme al mandamiento de Moisés, pidiendo de los egipcios alhajas de plata, y de oro, y vestidos. 36 Y Jehová dio gracia al pueblo delante de los egipcios, y les dieron cuanto pedían; así despojaron a los egipcios. 37 Partieron los hijos de Israel de Ramesés a Sucot, como seiscientos mil hombres de a pie, sin contar los niños. 38 También subió con ellos grande multitud de toda clase de gentes, y ovejas, y muchísimo ganado. 39 Y cocieron tortas sin levadura de la masa que habían sacado de Egipto, pues no había leudado, porque al echarlos fuera los egipcios, no habían tenido tiempo ni para prepararse comida. 40 El tiempo que los hijos de Israel habitaron en Egipto fue cuatrocientos treinta años. 41 Y pasados los cuatrocientos treinta años, en el mismo día todas las huestes de Jehová salieron de la tierra de Egipto. 42 Es noche de guardar para Jehová, por haberlos sacado en ella de la tierra de Egipto. Esta noche deben guardarla para Jehová todos los hijos de Israel en sus generaciones. NTV 31 Esa noche el faraón mandó llamar a Moisés y a Aarón y les dijo a gritos: «¡Lárguense! ¡Váyanse! ¡Dejen en paz a mi pueblo — les ordenó — y llévense a todos los demás israelitas con ustedes! Vayan y adoren al Señor como han pedido. 32 Llévense sus rebaños y sus manadas, como dijeron, y márchense ya. Váyanse, pero bendíganme al salir». 33 Todos los egipcios apresuraban al pueblo de Israel a que abandonara la tierra cuanto antes, porque pensaban: «¡Todos moriremos! ». 34 Entonces los israelitas se llevaron su masa de pan sin agregarle levadura. Envolvieron las tablas de amasar en sus mantos y las cargaron sobre los hombros. 35 Los israelitas hicieron lo que Moisés les había indicado: pidieron a los egipcios ropa y objetos de plata y de oro. 36 Y el Señor hizo que los egipcios miraran con agrado a los israelitas, y dieron al pueblo de Israel todo lo que pidió. ¡Así despojaron a los egipcios de sus riquezas! 37 Esa noche el pueblo de Israel salió de Ramsés y emprendió viaje hacia Sucot. Eran unos seiscientos mil hombres, además de las mujeres y los niños. 38 Con ellos salió una gentuza que no era israelita, junto con grandes rebaños y manadas. 39 Hornearon pan plano de la masa sin levadura que habían sacado de Egipto. La masa no tenía levadura porque los israelitas fueron expulsados de Egipto con tanto apuro que no tuvieron tiempo de preparar pan ni cualquier otro alimento. 40 El pueblo de Israel había vivido cuatrocientos treinta años en Egipto. 41 De hecho, fue precisamente el día en que se cumplían los cuatrocientos treinta años que toda esa gran multitud del Señor salió de Egipto. 42 Esa misma noche, el Señor cumplió su promesa de sacar a su pueblo de la tierra de Egipto. Así que esa noche le pertenece a él y por eso todos los israelitas deberán conmemorarla cada año, de generación en generación.
Ni siquiera comenzó con Jesucristo en la Tierra Mateo 1:18-25
RVR1960 (Lc. 2.
1-7) 18 El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo. 19 José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente. 20 Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es. 21 Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. 22 Todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho por el Señor por medio del profeta, cuando dijo: 23 He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros. 24 Y despertando José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado, y recibió a su mujer. 25 Pero no la conoció hasta que dio a luz a su hijo primogénito; y le puso por nombre JESÚS.
NTV 18 Este es el relato de cómo nació Jesús el Mesías. Su madre, María, estaba comprometida para casarse con José, pero antes de que la boda se realizara, mientras todavía era virgen, quedó embarazada mediante el poder del Espíritu Santo. 19 José, su prometido, era un hombre justo y no quiso avergonzarla en público; por lo tanto, decidió romper el compromiso en privado. 20 Mientras consideraba esa posibilidad, un ángel del Señor se le apareció en un sueño. «José, hijo de David — le dijo el ángel — , no tengas miedo de recibir a María por esposa, porque el niño que lleva dentro de ella fue concebido por el Espíritu Santo. 21 Y tendrá un hijo y lo llamarás Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados». 22 Todo eso sucedió para que se cumpliera el mensaje del Señor a través de su profeta: 23 «¡Miren! ¡La virgen concebirá un niño! Dará a luz un hijo, y lo llamarán Emanuel, que significa “Dios está con nosotros”». 24 Cuando José despertó, hizo como el ángel del Señor le había ordenado y recibió a María por esposa, 25 pero no tuvo relaciones sexuales con ella hasta que nació su hijo; y José le puso por nombre Jesús.
ni con los viajes misioneros de Pablo Hechos 13:4-14
RVR1960 4 Ellos, entonces, enviados por el Espíritu Santo, descendieron a Seleucia, y de allí navegaron a Chipre. 5 Y llegados a Salamina, anunciaban la palabra de Dios en las sinagogas de los judíos. Tenían también a Juan de ayudante. 6 Y habiendo atravesado toda la isla hasta Pafos, hallaron a cierto mago, falso profeta, judío, llamado Barjesús, 7 que estaba con el procónsul Sergio Paulo, varón prudente. Este, llamando a Bernabé y a Saulo, deseaba oír la palabra de Dios. 8 Pero les resistía Elimas, el mago (pues así se traduce su nombre), procurando apartar de la fe al procónsul. 9 Entonces Saulo, que también es Pablo, lleno del Espíritu Santo, fijando en él los ojos, 10 dijo: ¡Oh, lleno de todo engaño y de toda maldad, hijo del diablo, enemigo de toda justicia! ¿No cesarás de trastornar los caminos rectos del Señor? 11 Ahora, pues, he aquí la mano del Señor está contra ti, y serás ciego, y no verás el sol por algún tiempo. E inmediatamente cayeron sobre él oscuridad y tinieblas; y andando alrededor, buscaba quien le condujese de la mano. 12 Entonces el procónsul, viendo lo que había sucedido, creyó, maravillado de la doctrina del Señor. 13 Habiendo zarpado de Pafos, Pablo y sus compañeros arribaron a Perge de Panfilia; pero Juan, apartándose de ellos, volvió a Jerusalén. 14 Ellos, pasando de Perge, llegaron a Antioquía de Pisidia; y entraron en la sinagoga un día de reposo y se sentaron. NTV 4 Entonces Bernabé y Saulo fueron enviados por el Espíritu Santo. Descendieron hasta el puerto de Seleucia y después navegaron hacia la isla de Chipre. 5 Allí, en la ciudad de Salamina, fueron a las sinagogas judías y predicaron la palabra de Dios. Juan Marcos fue con ellos como su asistente. 6 Después viajaron de ciudad en ciudad por toda la isla hasta que finalmente llegaron a Pafos, donde conocieron a un hechicero judío, un falso profeta llamado Barjesús. 7 El tal se había apegado al gobernador, Sergio Paulo, quien era un hombre inteligente. El gobernador invitó a Bernabé y a Saulo para que fueran a verlo, porque quería oír la palabra de Dios; 8 pero Elimas, el hechicero (eso es lo que significa su nombre en griego), se entrometió y trataba de persuadir al gobernador para que no prestara atención a lo que Bernabé y Saulo decían. Trataba de impedir que el gobernador creyera. 9 Saulo, también conocido como Pablo, fue lleno del Espíritu Santo y miró al hechicero a los ojos. 10 Luego dijo: «¡Tú, hijo del diablo, lleno de toda clase de engaño y fraude, y enemigo de todo lo bueno! ¿Nunca dejarás de distorsionar los caminos verdaderos del Señor? 11 Ahora mira, el Señor ha puesto su mano de castigo sobre ti, y quedarás ciego. No verás la luz del sol por un tiempo». Al instante, neblina y oscuridad cubrieron los ojos del hombre, y comenzó a andar a tientas, mientras suplicaba que alguien lo tomara de la mano y lo guiara. 12 Cuando el gobernador vio lo que había sucedido, se convirtió, pues quedó asombrado de la enseñanza acerca del Señor. 13 Luego Pablo y sus compañeros salieron de Pafos en barco rumbo a Panfilia y desembarcaron en la ciudad portuaria de Perge. Allí Juan Marcos los dejó y regresó a Jerusalén; 14 pero Pablo y Bernabé siguieron su viaje por tierra adentro hasta Antioquía de Pisidia. El día de descanso fueron a las reuniones de la sinagoga.
Hechos 13:26
RVR1960 26 Varones hermanos, hijos del linaje de Abraham, y los que entre vosotros teméis a Dios, a vosotros es enviada la palabra de esta salvación. NTV 26 »Hermanos — ustedes, hijos de Abraham, y también ustedes, gentiles temerosos de Dios — , ¡este mensaje de salvación ha sido enviado a nosotros!
Esta misión comenzó con Dios mismo, cuando trajo a la existencia el Universo y luego creó a la humanidad Génesis 1:26-27
RVR1960 26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. 27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. NTV 26 Entonces Dios dijo: «Hagamos a los seres humanos a nuestra imagen, para que sean como nosotros. Ellos reinarán sobre los peces del mar, las aves del cielo, los animales domésticos, todos los animales salvajes de la tierra y los animales pequeños que corren por el suelo». 27 Así que Dios creó a los seres humanos a su propia imagen. A imagen de Dios los creó; hombre y mujer los creó.

En las Escrituras, vemos a un Dios que intencionalmente se acerca a sus hijos y desea estar con ellos. Desde el principio, establece una relación con Adán y con Eva. Aun después de la entrada del pecado, él continúa con su misión. Pero esa misión ahora es restablecer su relación con la humanidad. Finalmente, la misión de Dios se cumplirá Apocalipsis 21-22
RVR1960 1 Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más. 2 Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido. 3 Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios. 4 Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron. 5 Y el que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas. Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas. 6 Y me dijo: Hecho está. Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin. Al que tuviere sed, yo le daré gratuitamente de la fuente del agua de la vida. 7 El que venciere heredará todas las cosas, y yo seré su Dios, y él será mi hijo. 8 Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda. 9 Vino entonces a mí uno de los siete ángeles que tenían las siete copas llenas de las siete plagas postreras, y habló conmigo, diciendo: Ven acá, yo te mostraré la desposada, la esposa del Cordero. 10 Y me llevó en el Espíritu a un monte grande y alto, y me mostró la gran ciudad santa de Jerusalén, que descendía del cielo, de Dios, 11 teniendo la gloria de Dios. Y su fulgor era semejante al de una piedra preciosísima, como piedra de jaspe, diáfana como el cristal. 12 Tenía un muro grande y alto con doce puertas; y en las puertas, doce ángeles, y nombres inscritos, que son los de las doce tribus de los hijos de Israel; 13 al oriente tres puertas; al norte tres puertas; al sur tres puertas; al occidente tres puertas. 14 Y el muro de la ciudad tenía doce cimientos, y sobre ellos los doce nombres de los doce apóstoles del Cordero. 15 El que hablaba conmigo tenía una caña de medir, de oro, para medir la ciudad, sus puertas y su muro. 16 La ciudad se halla establecida en cuadro, y su longitud es igual a su anchura; y él midió la ciudad con la caña, doce mil estadios; la longitud, la altura y la anchura de ella son iguales. 17 Y midió su muro, ciento cuarenta y cuatro codos, de medida de hombre, la cual es de ángel. 18 El material de su muro era de jaspe; pero la ciudad era de oro puro, semejante al vidrio limpio; 19 y los cimientos del muro de la ciudad estaban adornados con toda piedra preciosa. El primer cimiento era jaspe; el segundo, zafiro; el tercero, ágata; el cuarto, esmeralda; 20 el quinto, ónice; el sexto, cornalina; el séptimo, crisólito; el octavo, berilo; el noveno, topacio; el décimo, crisopraso; el undécimo, jacinto; el duodécimo, amatista. 21 Las doce puertas eran doce perlas; cada una de las puertas era una perla. Y la calle de la ciudad era de oro puro, transparente como vidrio. 22 Y no vi en ella templo; porque el Señor Dios Todopoderoso es el templo de ella, y el Cordero. 23 La ciudad no tiene necesidad de sol ni de luna que brillen en ella; porque la gloria de Dios la ilumina, y el Cordero es su lumbrera. 24 Y las naciones que hubieren sido salvas andarán a la luz de ella; y los reyes de la tierra traerán su gloria y honor a ella. 25 Sus puertas nunca serán cerradas de día, pues allí no habrá noche. 26 Y llevarán la gloria y la honra de las naciones a ella. 27 No entrará en ella ninguna cosa inmunda, o que hace abominación y mentira, sino solamente los que están inscritos en el libro de la vida del Cordero. 1 Después me mostró un río limpio de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero. 2 En medio de la calle de la ciudad, y a uno y otro lado del río, estaba el árbol de la vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para la sanidad de las naciones. 3 Y no habrá más maldición; y el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le servirán, 4 y verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes. 5 No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol, porque Dios el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos de los siglos. 6 Y me dijo: Estas palabras son fieles y verdaderas. Y el Señor, el Dios de los espíritus de los profetas, ha enviado su ángel, para mostrar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto. 7 ¡He aquí, vengo pronto! Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro. 8 Yo Juan soy el que oyó y vio estas cosas. Y después que las hube oído y visto, me postré para adorar a los pies del ángel que me mostraba estas cosas. 9 Pero él me dijo: Mira, no lo hagas; porque yo soy consiervo tuyo, de tus hermanos los profetas, y de los que guardan las palabras de este libro. Adora a Dios. 10 Y me dijo: No selles las palabras de la profecía de este libro, porque el tiempo está cerca. 11 El que es injusto, sea injusto todavía; y el que es inmundo, sea inmundo todavía; y el que es justo, practique la justicia todavía; y el que es santo, santifíquese todavía. 12 He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra. 13 Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin, el primero y el último. 14 Bienaventurados los que lavan sus ropas, para tener derecho al árbol de la vida, y para entrar por las puertas en la ciudad. 15 Mas los perros estarán fuera, y los hechiceros, los fornicarios, los homicidas, los idólatras, y todo aquel que ama y hace mentira. 16 Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias. Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella resplandeciente de la mañana. 17 Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente. 18 Yo testifico a todo aquel que oye las palabras de la profecía de este libro: Si alguno añadiere a estas cosas, Dios traerá sobre él las plagas que están escritas en este libro. 19 Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida, y de la santa ciudad y de las cosas que están escritas en este libro. 20 El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús. 21 La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos vosotros. Amén. Apocalipsis 21: 1 : Is. 65.
17; 66.
22; 2 P. 3.
13. Apocalipsis 21: 2 : Is. 52.
1. Apocalipsis 21: 2 : Ap. 3.
12. Apocalipsis 21: 2 : Is. 61.
10. Apocalipsis 21: 3 : Ez. 37.
27. Apocalipsis 21: 4 : Is. 25.
8. Apocalipsis 21: 4 : Is. 65.
19. Apocalipsis 21: 6 : Is. 55.
1. Apocalipsis 21: 7 : 2 S. 7.
14; 1 Cr. 17.
13. Apocalipsis 21: 10 : Ez. 40.
2. Apocalipsis 21: 13 : Ez. 48.
30-34. Apocalipsis 21: 15 : Ez. 40.
3. Apocalipsis 21: 21 : Is. 54.
11-12. Apocalipsis 21: 23 : Is. 60.
19. Apocalipsis 21: 26 : Is. 60.
11. Apocalipsis 21: 27 : Is. 52.
1. Apocalipsis 22: 1 : Ez. 47.
1; Zac. 14.
8. Apocalipsis 22: 2 : Gn. 2.
9. Apocalipsis 22: 3 : Zac. 14.
11. Apocalipsis 22: 5 : Is. 60.
19. Apocalipsis 22: 5 : Dn. 7.
18. Apocalipsis 22: 11 : Dn. 12.
10. Apocalipsis 22: 12 : Is. 40.
10; 62.
11. Apocalipsis 22: 12 : Sal. 28.
4. Apocalipsis 22: 13 : Ap. 1.
8. Apocalipsis 22: 13 : Is. 44.
6; 48.
12; Ap. 1.
17; 2.
8. Apocalipsis 22: 14 : Gn. 2.
9; 3.
22. Apocalipsis 22: 16 : Is. 11.
1. Apocalipsis 22: 17 : Is. 55.
1. Apocalipsis 22: 19 : Dt. 4.
2; 12.
32.
NTV 1 Entonces vi un cielo nuevo y una tierra nueva, porque el primer cielo y la primera tierra habían desaparecido y también el mar. 2 Y vi la ciudad santa, la nueva Jerusalén, que descendía del cielo desde la presencia de Dios, como una novia hermosamente vestida para su esposo. 3 Oí una fuerte voz que salía del trono y decía: «¡Miren, el hogar de Dios ahora está entre su pueblo! Él vivirá con ellos, y ellos serán su pueblo. Dios mismo estará con ellos. 4 Él les secará toda lágrima de los ojos, y no habrá más muerte ni tristeza ni llanto ni dolor. Todas esas cosas ya no existirán más». 5 Y el que estaba sentado en el trono dijo: «¡Miren, hago nuevas todas las cosas! ». Entonces me dijo: «Escribe esto, porque lo que te digo es verdadero y digno de confianza». 6 También dijo: «¡Todo ha terminado! Yo soy el Alfa y la Omega, el Principio y el Fin. A todo el que tenga sed, yo le daré a beber gratuitamente de los manantiales del agua de la vida. 7 Los que salgan vencedores heredarán todas esas bendiciones, y yo seré su Dios, y ellos serán mis hijos. 8 »Pero los cobardes, los incrédulos, los corruptos, los asesinos, los que cometen inmoralidades sexuales, los que practican la brujería, los que rinden culto a ídolos y todos los mentirosos, tendrán su destino en el lago de fuego que arde con azufre. Esta es la segunda muerte». 9 Entonces uno de los siete ángeles que tenían las siete copas con las últimas siete plagas se me acercó y me dijo: «¡Ven conmigo! Te mostraré a la novia, la esposa del Cordero». 10 Así que me llevó en el Espíritu a una montaña grande y alta, y me mostró la ciudad santa, Jerusalén, que descendía del cielo, desde la presencia de Dios. 11 Resplandecía de la gloria de Dios y brillaba como una piedra preciosa, como un jaspe tan transparente como el cristal. 12 La muralla de la ciudad era alta y ancha, y tenía doce puertas vigiladas por doce ángeles. Los nombres de las doce tribus de Israel estaban escritos en las puertas. 13 Había tres puertas a cada lado: al oriente, al norte, al sur y al occidente. 14 La muralla de la ciudad estaba fundada sobre doce piedras, las cuales llevaban escritos los nombres de los doce apóstoles del Cordero. 15 El ángel que hablaba conmigo tenía en la mano una vara de oro para medir la ciudad, sus puertas y su muralla. 16 Cuando la midió se dio cuenta de que era cuadrada, que medía lo mismo de ancho que de largo. En realidad, medía 2220 kilómetros de largo, lo mismo de alto y lo mismo de ancho. 17 Después midió el grosor de las murallas, que eran de sesenta y cinco metros (según la medida humana que el ángel usó). 18 La muralla estaba hecha de jaspe, y la ciudad era de oro puro y tan cristalino como el vidrio. 19 La muralla de la ciudad estaba fundada sobre doce piedras, cada una adornada con una piedra preciosa: la primera con jaspe, la segunda con zafiro, la tercera con ágata, la cuarta con esmeralda, 20 la quinta con ónice, la sexta con cornalina, la séptima con crisólito, la octava con berilo, la novena con topacio, la décima con crisoprasa, la undécima con jacinto y la duodécima con amatista. 21 Las doce puertas estaban hechas de perlas, ¡cada puerta hecha de una sola perla! Y la calle principal era de oro puro y tan cristalino como el vidrio. 22 No vi ningún templo en la ciudad, porque el Señor Dios Todopoderoso y el Cordero son el templo. 23 La ciudad no tiene necesidad de sol ni de luna, porque la gloria de Dios ilumina la ciudad, y el Cordero es su luz. 24 Las naciones caminarán a la luz de la ciudad, y los reyes del mundo entrarán en ella con toda su gloria. 25 Las puertas nunca se cerrarán al terminar el día porque allí no existe la noche. 26 Todas las naciones llevarán su gloria y honor a la ciudad. 27 No se permitirá la entrada a ninguna cosa mala ni tampoco a nadie que practique la idolatría y el engaño. Solo podrán entrar los que tengan su nombre escrito en el libro de la vida del Cordero. 1 Luego el ángel me mostró un río con el agua de la vida, era transparente como el cristal y fluía del trono de Dios y del Cordero. 2 Fluía por el centro de la calle principal. A cada lado del río crecía el árbol de la vida, el cual produce doce cosechas de fruto, y una cosecha nueva cada mes. Las hojas se usaban como medicina para sanar a las naciones. 3 Ya no habrá más maldición sobre ninguna cosa, porque allí estará el trono de Dios y del Cordero, y sus siervos lo adorarán. 4 Verán su rostro y tendrán su nombre escrito en la frente. 5 Allí no existirá la noche — no habrá necesidad de la luz de lámparas ni del sol — porque el Señor Dios brillará sobre ellos. Y ellos reinarán por siempre y para siempre. 6 Entonces el ángel me dijo: «Todo lo que has oído y visto es verdadero y digno de confianza. El Señor Dios, que inspira a sus profetas, ha enviado a su ángel para decirles a sus siervos lo que pronto sucederá». 7 «Miren, ¡yo vengo pronto! Benditos son los que obedecen las palabras de la profecía que están escritas en este libro ». 8 Yo, Juan, soy el que vio y oyó todas estas cosas. Cuando las oí y las vi, me postré para adorar a los pies del ángel que me las mostró. 9 Pero él dijo: «No, no me adores a mí. Yo soy un siervo de Dios tal como tú y tus hermanos los profetas, al igual que todos los que obedecen lo que está escrito en este libro. ¡Adora únicamente a Dios! ». 10 Entonces me indicó: «No selles las palabras proféticas de este libro porque el tiempo está cerca. 11 Deja que el malo siga haciendo el mal; deja que el vil siga siendo vil; deja que el justo siga llevando una vida justa; deja que el santo permanezca santo». 12 «Miren, yo vengo pronto, y traigo la recompensa conmigo para pagarle a cada uno según lo que haya hecho. 13 Yo soy el Alfa y la Omega, el Primero y el Último, el Principio y el Fin». 14 Benditos son los que lavan sus ropas. A ellos se les permitirá entrar por las puertas de la ciudad y comer del fruto del árbol de la vida. 15 Fuera de la ciudad están los perros: los que practican la brujería, los que cometen inmoralidades sexuales, los asesinos, los que rinden culto a ídolos, y todos los que se deleitan en vivir una mentira. 16 «Yo, Jesús, he enviado a mi ángel con el fin de darte este mensaje para las iglesias. Yo soy tanto la fuente de David como el heredero de su trono. Yo soy la estrella brillante de la mañana». 17 El Espíritu y la esposa dicen: «Ven». Que todos los que oyen esto, digan: «Ven». Todos los que tengan sed, vengan. Todo aquel que quiera, beba gratuitamente del agua de la vida. 18 Yo declaro solemnemente a todos los que oyen las palabras de la profecía escritas en este libro: si alguien agrega algo a lo que está escrito aquí, Dios le agregará a esa persona las plagas que se describen en este libro. 19 Y si alguien quita cualquiera de las palabras de este libro de profecía, Dios le quitará su parte del árbol de la vida y de la ciudad santa que se describen en este libro. 20 Aquel que es el testigo fiel de todas esas cosas dice: «¡Sí, yo vengo pronto! ». ¡Amén! ¡Ven, Señor Jesús! 21 Que la gracia del Señor Jesús sea con el pueblo santo de Dios.
y por esta razón debemos motivarnos en la labor de proclamar el evangelio eterno al mundo Apocalipsis 14:6-7
RVR1960 6 Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo, 7 diciendo a gran voz: Temed a Dios, y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado; y adorad a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas. NTV 6 Y vi a otro ángel, que volaba por el cielo y llevaba la eterna Buena Noticia para proclamarla a los que pertenecen a este mundo: a todo pueblo y toda nación, tribu y lengua. 7 «Teman a Dios — gritaba — . Denle gloria a él, porque ha llegado el tiempo en que ocupe su lugar como juez. Adoren al que hizo los cielos, la tierra, el mar y todos los manantiales de agua».

Por lo tanto, el fundamento de todo esfuerzo misionero debe centrarse en una relación con el Creador y en la comprensión adecuada de su naturaleza y su carácter misioneros.

DOMINGO — El Dios que nos tiende la mano

Dios nos creó a su imagen y semejanza. Nos entregó un mundo perfecto, y su propósito era que viviéramos en perfecta conexión con él; una relación centrada en su atributo más precioso: el amor. Pero, para que el amor sea real, Dios también nos dio otro don precioso: el libre albedrío, la libertad de elegir qué camino seguir. Por supuesto, Dios dio instrucciones claras a Adán y a Eva sobre el peligro y las consecuencias mortales de la desobediencia Génesis 2:16-17
RVR1960 16 Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; 17 mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás. NTV 16 pero el Señor Dios le advirtió: «Puedes comer libremente del fruto de cualquier árbol del huerto, 17 excepto del árbol del conocimiento del bien y del mal. Si comes de su fruto, sin duda morirás».
Satanás, por su parte, persuadió engañosamente a Eva de que podía comer del fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal sin ninguna consecuencia negativa; al contrario, afirmó: “Serán como Dios, conocedores del bien y del mal” Génesis 3:5
RVR1960 5 sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal. NTV 5 Dios sabe que, en cuanto coman del fruto, se les abrirán los ojos y serán como Dios, con el conocimiento del bien y del mal.
Por desgracia, Eva decidió desobedecer y le ofreció el fruto a Adán, quien tomó la misma decisión. Por ende, la Creación perfecta se tiñó de pecado.

Ese momento cambió el plan y el propósito originales de Dios para el planeta Tierra, recientemente creado. La misión de salvación, que había sido planificada “antes de la creación del mundo” Efesios 1:4
RVR1960 4 según nos escogió en él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él, NTV 4 Incluso antes de haber hecho el mundo, Dios nos amó y nos eligió en Cristo para que seamos santos e intachables a sus ojos.
debía implementarse ahora.

Lee Génesis 3:9-15
RVR1960 9 Mas Jehová Dios llamó al hombre, y le dijo: ¿Dónde estás tú? 10 Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba desnudo; y me escondí. 11 Y Dios le dijo: ¿Quién te enseñó que estabas desnudo? ¿Has comido del árbol del que yo te mandé no comieses? 12 Y el hombre respondió: La mujer que me diste por compañera me dio del árbol, y yo comí. 13 Entonces Jehová Dios dijo a la mujer: ¿Qué es lo que has hecho? Y dijo la mujer: La serpiente me engañó, y comí. 14 Y Jehová Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo; sobre tu pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida. 15 Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; esta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar. NTV 9 Entonces el Señor Dios llamó al hombre: — ¿Dónde estás? 10 El hombre contestó: — Te oí caminando por el huerto, así que me escondí. Tuve miedo porque estaba desnudo. 11 — ¿Quién te dijo que estabas desnudo? — le preguntó el Señor Dios — . ¿Acaso has comido del fruto del árbol que te ordené que no comieras? 12 El hombre contestó: — La mujer que tú me diste fue quien me dio del fruto, y yo lo comí. 13 Entonces el Señor Dios le preguntó a la mujer: — ¿Qué has hecho? — La serpiente me engañó — contestó ella — . Por eso comí. 14 Entonces el Señor Dios le dijo a la serpiente: «Por lo que has hecho, eres maldita más que todos los animales, tanto domésticos como salvajes. Andarás sobre tu vientre, arrastrándote por el polvo durante toda tu vida. 15 Y pondré hostilidad entre tú y la mujer, y entre tu descendencia y la descendencia de ella. Su descendiente te golpeará la cabeza, y tú le golpearás el talón».

¿Cuáles fueron las primeras palabras de Dios a Adán después de que él y Eva cayeran, y por qué esa declaración es tan significativa incluso hoy en términos teológicos?

Por supuesto, Dios sabía exactamente dónde estaban. Dominados por el miedo, Adán y Eva eran quienes necesitaban ver lo que estaba sucediendo. Pero también necesitaban ser confrontados para que pudieran comprender las terribles consecuencias de su pecado. También Satanás debía ser derrotado. Para ello, Dios comenzó a presentar su misión: el plan de redención ver Génesis 3:14-15
RVR1960 14 Y Jehová Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo; sobre tu pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida. 15 Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar. NTV 14 Entonces el Señor Dios le dijo a la serpiente: «Por lo que has hecho, eres maldita más que todos los animales, tanto domésticos como salvajes. Andarás sobre tu vientre, arrastrándote por el polvo durante toda tu vida. 15 Y pondré hostilidad entre tú y la mujer, y entre tu descendencia y la descendencia de ella. Su descendiente te golpeará la cabeza, y tú le golpearás el talón».
la única esperanza de reconciliar “consigo al mundo” 2 Corintios 5:19
RVR1960 19 que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación. NTV 19 Pues Dios estaba en Cristo reconciliando al mundo consigo mismo, no tomando más en cuenta el pecado de la gente. Y nos dio a nosotros este maravilloso mensaje de reconciliación.

Sin embargo, debemos prestar mucha atención al hecho de que, antes de la confrontación y de la promesa de reconciliación, Dios fue en busca de la humanidad caída. A pesar de la situación aparentemente desesperada, Dios aborda esencialmente dos cuestiones en su pregunta a Adán: su naturaleza misionera y nuestro estado caído. Estamos perdidos y necesitamos desesperadamente la salvación. Él es quien sale a nuestro encuentro decidido a salvarnos y a estar con nosotros.

De principio a fin de la historia, Dios sigue preguntando: “¿Dónde estás?” En tu experiencia personal, ¿qué significa esto para ti y cómo le respondiste?

LUNES — El Dios que anhela estar con nosotros

Lee Génesis 17:7
RVR1960 7 Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo, para ser tu Dios, y el de tu descendencia después de ti. NTV 7 »Yo confirmaré mi pacto contigo y con tus descendientes después de ti, de generación en generación. Este es el pacto eterno: yo siempre seré tu Dios y el Dios de todos tus descendientes,
Génesis 26:3
RVR1960 3 Habita como forastero en esta tierra, y estaré contigo, y te bendeciré; porque a ti y a tu descendencia daré todas estas tierras, y confirmaré el juramento que hice a Abraham tu padre. NTV 3 Vive aquí como extranjero en esta tierra, y yo estaré contigo y te bendeciré. Yo, con estas palabras, confirmo que te daré todas estas tierras a ti y a tu descendencia, tal como le prometí solemnemente a Abraham, tu padre.
Génesis 28:15
RVR1960 15 He aquí, yo estoy contigo, y te guardaré por dondequiera que fueres, y volveré a traerte a esta tierra; porque no te dejaré hasta que haya hecho lo que te he dicho. NTV 15 Además, yo estoy contigo y te protegeré dondequiera que vayas. Llegará el día en que te traeré de regreso a esta tierra. No te dejaré hasta que haya terminado de darte todo lo que te he prometido».

¿Cuál fue el enfoque principal de la promesa de Dios a Abraham y sus descendientes en estos versículos?

En la narración del Antiguo Testamento, Dios sigue actuando según su naturaleza misionera para cumplir sus propósitos. Por ejemplo, después del Diluvio, el pueblo de Babel decidió reunirse en un mismo lugar para construir una ciudad y una torre que llegara hasta el cielo. Dios intervino al confundir su lenguaje con el objetivo de dispersarlos por todo el mundo Génesis 11:1-9
RVR1960 1 Tenía entonces toda la tierra una sola lengua y unas mismas palabras. 2 Y aconteció que cuando salieron de oriente, hallaron una llanura en la tierra de Sinar, y se establecieron allí. 3 Y se dijeron unos a otros: Vamos, hagamos ladrillo y cozámoslo con fuego. Y les sirvió el ladrillo en lugar de piedra, y el asfalto en lugar de mezcla. 4 Y dijeron: Vamos, edifiquémonos una ciudad y una torre, cuya cúspide llegue al cielo; y hagámonos un nombre, por si fuéremos esparcidos sobre la faz de toda la tierra. 5 Y descendió Jehová para ver la ciudad y la torre que edificaban los hijos de los hombres. 6 Y dijo Jehová: He aquí el pueblo es uno, y todos estos tienen un solo lenguaje; y han comenzado la obra, y nada les hará desistir ahora de lo que han pensado hacer. 7 Ahora, pues, descendamos, y confundamos allí su lengua, para que ninguno entienda el habla de su compañero. 8 Así los esparció Jehová desde allí sobre la faz de toda la tierra, y dejaron de edificar la ciudad. 9 Por esto fue llamado el nombre de ella Babel, porque allí confundió Jehová el lenguaje de toda la tierra, y desde allí los esparció sobre la faz de toda la tierra. NTV 1 Hubo un tiempo en que todos los habitantes del mundo hablaban el mismo idioma y usaban las mismas palabras. 2 Al emigrar hacia el oriente, encontraron una llanura en la tierra de Babilonia y se establecieron allí. 3 Comenzaron a decirse unos a otros: «Vamos a hacer ladrillos y endurecerlos con fuego». (En esa región, se usaban ladrillos en lugar de piedra y la brea se usaba como mezcla). 4 Entonces dijeron: «Vamos, construyamos una gran ciudad para nosotros con una torre que llegue hasta el cielo. Eso nos hará famosos y evitará que nos dispersemos por todo el mundo». 5 Pero el Señor descendió para ver la ciudad y la torre que estaban construyendo, 6 y dijo: «¡Miren! La gente está unida, y todos hablan el mismo idioma. Después de esto, ¡nada de lo que se propongan hacer les será imposible! 7 Vamos a bajar a confundirlos con diferentes idiomas; así no podrán entenderse unos a otros». 8 De esa manera, el Señor los dispersó por todo el mundo, y ellos dejaron de construir la ciudad. 9 Por eso la ciudad se llamó Babel, porque fue allí donde el Señor confundió a la gente con distintos idiomas. Así los dispersó por todo el mundo.
Luego, amplió su misión al llamar a Abram (que más tarde pasó a ser Abraham) a fin de que fuera un canal de sus bendiciones para todo el mundo Génesis 12:1-3
RVR1960 1 Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. (A) 2 Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. 3 Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra. (B) NTV 1 El Señor le había dicho a Abram: «Deja tu patria y a tus parientes y a la familia de tu padre, y vete a la tierra que yo te mostraré. 2 Haré de ti una gran nación; te bendeciré y te haré famoso, y serás una bendición para otros. 3 Bendeciré a quienes te bendigan y maldeciré a quienes te traten con desprecio. Todas las familias de la tierra serán bendecidas por medio de ti».
Las promesas de Dios a Abraham y a sus descendientes fueron múltiples, pero una se destaca por sobre las demás. Varias veces, básicamente, Dios les declaró: “Seré tu Dios”; “Yo estaré contigo”; “Yo estoy contigo” (ver Génesis 17:7-8
RVR1960 7 Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo, para ser tu Dios, y el de tu descendencia después de ti. 8 Y te daré a ti, y a tu descendencia después de ti, la tierra en que moras, toda la tierra de Canaán en heredad perpetua; y seré el Dios de ellos. NTV 7 »Yo confirmaré mi pacto contigo y con tus descendientes después de ti, de generación en generación. Este es el pacto eterno: yo siempre seré tu Dios y el Dios de todos tus descendientes, 8 y les daré a ti y a tus descendientes toda la tierra de Canaán, donde ahora vives como extranjero. Será posesión de ellos para siempre, y yo seré su Dios».
Génesis 26:3
RVR1960 3 Habita como forastero en esta tierra, y estaré contigo, y te bendeciré; porque a ti y a tu descendencia daré todas estas tierras, y confirmaré el juramento que hice a Abraham tu padre. NTV 3 Vive aquí como extranjero en esta tierra, y yo estaré contigo y te bendeciré. Yo, con estas palabras, confirmo que te daré todas estas tierras a ti y a tu descendencia, tal como le prometí solemnemente a Abraham, tu padre.
Génesis 28:15
RVR1960 15 He aquí, yo estoy contigo, y te guardaré por dondequiera que fueres, y volveré a traerte a esta tierra; porque no te dejaré hasta que haya hecho lo que te he dicho. NTV 15 Además, yo estoy contigo y te protegeré dondequiera que vayas. Llegará el día en que te traeré de regreso a esta tierra. No te dejaré hasta que haya terminado de darte todo lo que te he prometido».

A medida que transcurre la historia, José termina en Egipto, pero como instrumento de salvación para su pueblo. A cada paso de la experiencia de José, incluso en los momentos más difíciles de su vida, la Biblia afirma que “el Señor estuvo con José” Génesis 39:2
RVR1960 2 Mas Jehová estaba con José, y fue varón próspero; y estaba en la casa de su amo el egipcio. NTV 2 El Señor estaba con José, por eso tenía éxito en todo mientras servía en la casa de su amo egipcio.
Génesis 39:21
RVR1960 21 Pero Jehová estaba con José y le extendió su misericordia, y le dio gracia en los ojos del jefe de la cárcel. NTV 21 pero el Señor estaba con José en la cárcel y le mostró su fiel amor. El Señor hizo que José fuera el preferido del encargado de la cárcel.
Génesis 39:23
RVR1960 23 No necesitaba atender el jefe de la cárcel cosa alguna de las que estaban al cuidado de José, porque Jehová estaba con José, y lo que él hacía, Jehová lo prosperaba. NTV 23 El encargado no tenía de qué preocuparse, porque José se ocupaba de todo. El Señor estaba con él y lo prosperaba en todo lo que hacía.
Generaciones más tarde, en cumplimiento de su misión, Dios envió a Moisés ante faraón para liberar a su pueblo de la esclavitud en Egipto. Al “enviar” a Moisés, Dios le dijo: “Ciertamente yo estaré contigo” Éxodo 3:12
RVR1960 12 Y él respondió: Ve, porque yo estaré contigo; y esto te será por señal de que yo te he enviado: cuando hayas sacado de Egipto al pueblo, serviréis a Dios sobre este monte. NTV 12 Dios contestó: — Yo estaré contigo. Y esta es la señal para ti de que yo soy quien te envía: cuando hayas sacado de Egipto al pueblo, adorarán a Dios en este mismo monte.
Una y otra vez, Jehová confirmó su profundo deseo de estar con su pueblo.

Lee Éxodo 29:43
RVR1960 43 Allí me reuniré con los hijos de Israel; y el lugar será santificado con mi gloria. NTV 43 Me reuniré allí con el pueblo de Israel, en el lugar que se hace sagrado por mi gloriosa presencia.
Éxodo 29:45
RVR1960 45 Y habitaré entre los hijos de Israel, y seré su Dios. NTV 45 Entonces viviré en medio de los israelitas y seré su Dios,

¿Cuál era uno de los principales propósitos del Santuario del Antiguo Testamento?

Dios decidió estar con sus hijos de una manera diferente. Confirmó a Moisés su anhelo de morar entre los hijos de Israel mediante la construcción del Tabernáculo y el establecimiento de un sistema muy deliberado y lleno de propósito, que apuntaría al instrumento definitivo de su misión: Jesucristo.

“Las ofrendas de los sacrificios y el sacerdocio del sistema judaico estaban constituidos para representar la muerte y la obra mediadora de Cristo. Todas estas ceremonias estaban desprovistas de significado. No tenían virtud alguna excepto en lo que se referían a Cristo” (Elena de White, Exaltad a Jesús, p. 18).

¿Cómo experimentas la presencia de Dios en tu vida?

MARTES — El Dios que se hizo uno con nosotros

El Antiguo Testamento presenta la manera en que el Creador comenzó a implementar un plan mediante un pueblo que debía representar su naturaleza y su propósito ante el mundo. Todo lo que Dios hizo fue conforme a su estrategia misionera. Por medio del profeta Isaías, Dios dijo: “Yo soy Dios, y no hay otro; nada hay semejante a mí, que anuncio el fin desde el principio [...]; que digo: ‘Mis planes se cumplirán, y hago todo lo que deseo’ ” Isaías 46:9-10
RVR1960 9 Acordaos de las cosas pasadas desde los tiempos antiguos; porque yo soy Dios, y no hay otro Dios, y nada hay semejante a mí, 10 que anuncio lo por venir desde el principio, y desde la antigüedad lo que aún no era hecho; que digo: Mi consejo permanecerá, y haré todo lo que quiero; NTV 9 Recuerden las cosas que hice en el pasado. ¡Pues solo yo soy Dios! Yo soy Dios, y no hay otro como yo. 10 Solo yo puedo predecir el futuro antes que suceda. Todos mis planes se cumplirán porque yo hago todo lo que deseo.
Sin embargo, en el Nuevo Testamento, el deseo de Dios de estar con la humanidad adquiere una nueva dimensión. Mediante la encarnación de Cristo, lo que era solo una promesa en el Jardín del Edén Génesis 3:15
RVR1960 15 Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar. NTV 15 Y pondré hostilidad entre tú y la mujer, y entre tu descendencia y la descendencia de ella. Su descendiente te golpeará la cabeza, y tú le golpearás el talón».
se convierte en realidad.

Lee el relato del anuncio del nacimiento de Jesús en Mateo 1:18-23
RVR1960 (Lc. 2.
1-7) 18 El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo. 19 José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente. 20 Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es. 21 Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. 22 Todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho por el Señor por medio del profeta, cuando dijo: 23 He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros.
NTV 18 Este es el relato de cómo nació Jesús el Mesías. Su madre, María, estaba comprometida para casarse con José, pero antes de que la boda se realizara, mientras todavía era virgen, quedó embarazada mediante el poder del Espíritu Santo. 19 José, su prometido, era un hombre justo y no quiso avergonzarla en público; por lo tanto, decidió romper el compromiso en privado. 20 Mientras consideraba esa posibilidad, un ángel del Señor se le apareció en un sueño. «José, hijo de David — le dijo el ángel — , no tengas miedo de recibir a María por esposa, porque el niño que lleva dentro de ella fue concebido por el Espíritu Santo. 21 Y tendrá un hijo y lo llamarás Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados». 22 Todo eso sucedió para que se cumpliera el mensaje del Señor a través de su profeta: 23 «¡Miren! ¡La virgen concebirá un niño! Dará a luz un hijo, y lo llamarán Emanuel, que significa “Dios está con nosotros”».

¿Qué cosas esenciales nos dice este relato sobre Dios?

“Dios con nosotros”. Emanuel. Dios había habitado entre su pueblo en el Santuario, y ahora habitaba con él en la persona física de Jesús de Nazaret. En efecto, con el nacimiento de Jesús, Dios presentó de forma concreta su continuo deseo de estar con nosotros en naturaleza y misión: el Hijo de Dios era plenamente humano y plenamente divino, y es aquel que afirmó: “Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie viene al Padre sino por mí” Juan 14:6
RVR1960 6 Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. NTV 6 Jesús le contestó: — Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie puede ir al Padre si no es por medio de mí.

Lee Juan 1:14-18
RVR1960 14 Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad. 15 Juan dio testimonio de él, y clamó diciendo: Este es de quien yo decía: El que viene después de mí, es antes de mí; porque era primero que yo. 16 Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia. 17 Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo. 18 A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer. NTV 14 Entonces la Palabra se hizo hombre y vino a vivir entre nosotros. Estaba lleno de amor inagotable y fidelidad. Y hemos visto su gloria, la gloria del único Hijo del Padre. 15 Juan dio testimonio de él cuando clamó a las multitudes: «A él me refería yo cuando decía: “Alguien viene después de mí que es muy superior a mí porque existe desde mucho antes que yo”». 16 De su abundancia, todos hemos recibido una bendición inmerecida tras otra. 17 Pues la ley fue dada por medio de Moisés, pero el amor inagotable de Dios y su fidelidad vinieron por medio de Jesucristo. 18 Nadie ha visto jamás a Dios; pero el Único, que es Dios, está íntimamente ligado al Padre. Él nos ha revelado a Dios.

¿Qué puedes aprender, a partir de la encarnación de Cristo, acerca de la misión de Dios en favor de nosotros?

Dios siguió adelante con su misión y luego, por medio de Jesucristo, se hizo presente en la carne entre sus hijos. El “unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad” Juan 1:14
RVR1960 14 Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad. NTV 14 Entonces la Palabra se hizo hombre y vino a vivir entre nosotros. Estaba lleno de amor inagotable y fidelidad. Y hemos visto su gloria, la gloria del único Hijo del Padre.
cumplió las profecías del Antiguo Testamento y, según el plan divino, se hizo uno con nosotros, Dios en carne humana. El Dios de la misión seguía cumpliendo su propósito.

Piensa en lo que significa que el amor de Dios por nosotros sea tan grande como para venir a nosotros en nuestra propia humanidad. ¿Cómo debemos responder a este amor, especialmente en cuanto a hacer obra misionera por los demás?

MIERCOLES — El Dios que sigue estando con nosotros

La vida y el ministerio de Jesús fueron la revelación suprema de Dios. En unos tres años, Dios pudo revelar más sobre quién era él y en qué consistía su misión que en todo lo que había hecho mediante los demás métodos en las generaciones anteriores. Cristo era la perfecta “imagen del Dios invisible”, aquel en quien “habitase toda su plenitud [...] haciendo la paz mediante la sangre de su cruz” Colosenses 1:15
RVR1960 15 Él es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación. NTV 15 Cristo es la imagen visible del Dios invisible. Él ya existía antes de que las cosas fueran creadas y es supremo sobre toda la creación
Colosenses 1:19-20
RVR1960 19 por cuanto agradó al Padre que en él habitase toda plenitud, 20 y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz. NTV 19 Pues a Dios, en toda su plenitud, le agradó vivir en Cristo, 20 y por medio de él, Dios reconcilió consigo todas las cosas. Hizo la paz con todo lo que existe en el cielo y en la tierra, por medio de la sangre de Cristo en la cruz.
En Cristo, la naturaleza misionera de Dios se dio a conocer por completo. Jesús mismo reveló su misión al decir: “El Hijo del hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido” Lucas 19:10
RVR1960 10 Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido. NTV 10 Pues el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar a los que están perdidos.

Lee Juan 3:16
RVR1960 16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. NTV 16 »Pues Dios amó tanto al mundo que dio a su único Hijo, para que todo el que crea en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.
y reflexiona detenidamente sobre el mensaje.

¿Cómo ves que interactúan aquí el amor y la misión de Dios?

Más adelante en su ministerio, cuando Jesús se acercaba a su última semana de vida, el destino final de la humanidad estaba en juego. Los acontecimientos que tuvieron lugar durante esos días conectaron la expectativa del pasado con la esperanza del futuro. Durante la celebración de la Pascua (que señalaba la liberación de la opresión en Egipto), Jesucristo, el Dios encarnado, entregó su vida para librarnos de la esclavitud del pecado. El apóstol Pablo escribió: “Al que no tenía pecado, Dios lo hizo pecado por nosotros, para que nosotros llegásemos a ser justicia de Dios en él” 2 Corintios 5:21
RVR1960 21 Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él. NTV 21 Pues Dios hizo que Cristo, quien nunca pecó, fuera la ofrenda por nuestro pecado, para que nosotros pudiéramos estar en una relación correcta con Dios por medio de Cristo.

Lee Mateo 28:18-20
RVR1960 18 Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. 19 Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; 20 enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén. NTV 18 Jesús se acercó y dijo a sus discípulos: «Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra. 19 Por lo tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. 20 Enseñen a los nuevos discípulos a obedecer todos los mandatos que les he dado. Y tengan por seguro esto: que estoy con ustedes siempre, hasta el fin de los tiempos».

¿Cuál es la promesa que podemos encontrar en la Gran Comisión? ¿Qué seguridad nos da al comprometernos con la misión de Dios?

La muerte de Cristo fue parte del proceso de reconciliación, no su fin. Mediante su resurrección, Jesús venció la muerte y recibió “toda autoridad [...] en el cielo y en la tierra” Mateo 28:18
RVR1960 18 Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. NTV 18 Jesús se acercó y dijo a sus discípulos: «Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra.
En vista de esta realidad, encomendó a todos sus seguidores que hicieran discípulos en todo el mundo, con una promesa asombrosa: “Yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo” Mateo 28:20
RVR1960 20 enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén. NTV 20 Enseñen a los nuevos discípulos a obedecer todos los mandatos que les he dado. Y tengan por seguro esto: que estoy con ustedes siempre, hasta el fin de los tiempos».

¿De qué manera experimentaste en tu propia vida el cumplimiento de la promesa de Jesús de estar “con ustedes todos los días” cuando te dedicas a la misión?

JUEVES — El Dios que volverá por nosotros

Lee Juan 14:1-3
RVR1960 1 No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. 2 En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. 3 Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis. NTV 1 »No dejen que el corazón se les llene de angustia; confíen en Dios y confíen también en mí. 2 En el hogar de mi Padre, hay lugar más que suficiente. Si no fuera así, ¿acaso les habría dicho que voy a prepararles un lugar? 3 Cuando todo esté listo, volveré para llevarlos, para que siempre estén conmigo donde yo estoy.

¿En qué medida este pasaje se vincula con el mensaje del tiempo del fin que se encuentra en las Escrituras?

Durante su ministerio terrenal, una de las promesas más preciosas de Cristo, la bendita esperanza, refleja una vez más el deseo del Creador de estar con nosotros por toda la eternidad. Jesús afirmó: “Vendré otra vez, y los llevaré conmigo, para que donde yo esté, ustedes también estén” Juan 14:3
RVR1960 3 Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis. NTV 3 Cuando todo esté listo, volveré para llevarlos, para que siempre estén conmigo donde yo estoy.

Según el apóstol Juan, la promesa finalmente se hará realidad. “Y oí una gran voz del cielo que decía: ‘El santuario de Dios estará con los hombres. Él habitará con ellos, y ellos serán su pueblo. Dios mismo estará con ellos, y será su Dios’ ” Apocalipsis 21:3
RVR1960 3 Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios. NTV 3 Oí una fuerte voz que salía del trono y decía: «¡Miren, el hogar de Dios ahora está entre su pueblo! Él vivirá con ellos, y ellos serán su pueblo. Dios mismo estará con ellos.

“La obra de la Redención será completada. Donde el pecado abundó, sobreabundó la gracia de Dios. La Tierra misma, el mismo campo que Satanás reclama como suyo, quedará no solo redimida sino también exaltada. [...] Aquí, donde el Hijo de Dios residió temporalmente en forma humana; donde el Rey de gloria vivió, sufrió y murió; aquí, cuando haga nuevas todas las cosas, estará ‘el tabernáculo de Dios con los hombres’. [...] Y, a través de las edades sin fin, mientras los redimidos anden en la luz del Señor, lo alabarán por su Don inefable: Emanuel, ‘Dios con nosotros’ ” (Elena de White, El Deseado de todas las gentes, p. 18).

Aquí encontramos el cuadro más hermoso de la Redención. El Dios de la misión finalmente cumplirá su deseo de estar con sus hijos por la eternidad. ¡Qué tremendo privilegio formar parte de esta realidad!

Desafíos semanales. Durante este trimestre, estás invitado a comprometerte conscientemente con la misión de Dios. Esta será una oportunidad para ver y experimentar al Dios de la misión obrando en tu vida. Aprovecha este momento para la reflexión personal y prepárate para compartir semanalmente lo que has aprendido con tu clase. Además, el desafío avanzado te animará a ampliar tu participación en la misión de Dios.

Desafío: Ora todos los días de la semana que viene para que Dios abra tu corazón a fin de ser parte de su misión

Desafío avanzado: Averigua el nombre de alguna persona con la que te relacionas pero que todavía no conoces: un vecino, un compañero de trabajo, un comerciante, un conductor de autobús, un conserje, etc. Comienza a orar por él o ella todos los días

VIERNES - Para Estudiar y Meditar

“El plan de nuestra redención no fue una reflexión ulterior, un plan formulado después de la caída de Adán. Fue una ‘revelación del misterio que por tiempos eternos fue guardado en silencio’ Romanos 16:25
RVR1960 25 Y al que puede confirmaros según mi evangelio y la predicación de Jesucristo, según la revelación del misterio que se ha mantenido oculto desde tiempos eternos, NTV 25 Que toda la gloria sea para Dios, quien puede fortalecerlos tal como expresa la Buena Noticia. En ese mensaje acerca de Jesucristo se ha revelado su plan para ustedes, los gentiles, un plan que estuvo guardado en secreto desde el principio del tiempo.
Fue una manifestación de los principios que desde las edades eternas habían sido el fundamento del Trono de Dios. Desde el principio, Dios y Cristo sabían de la apostasía de Satanás y de la caída del hombre por causa del poder seductor del apóstata. Dios no ordenó que el pecado existiese, sino que previó su existencia, e hizo provisión para enfrentar la terrible emergencia. Tan grande fue su amor por el mundo que se comprometió a dar a su Hijo unigénito, ‘para que todo aquel en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna’ Juan 3:16
RVR1960 16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. NTV 16 »Pues Dios amó tanto al mundo que dio a su único Hijo, para que todo el que crea en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.
” (Elena de White, El Deseado de todas las gentes, pp. 13, 14).

“Cristo no dijo a sus discípulos que su trabajo sería fácil. [...] Pero no se los dejaría luchar solos. Les aseguró que él estaría con ellos; y que si ellos avanzaban con fe estarían bajo el escudo de la Omnipotencia. [...] Mientras obedecieran su palabra y trabajasen en comunión con él, no podrían fracasar. Vayan a todas las naciones, les ordenó, vayan a las partes más alejadas del Globo habitable, y estén seguros de que aun allí mi presencia estará con ustedes. Trabajen con fe y confianza; porque yo no los olvidaré nunca. Estaré siempre con ustedes, ayudándolos a realizar y cumplir vuestro deber, guiándolos, alentándolos, santificándolos, sosteniéndolos y dándoles éxito en hablar palabras que llamen la atención de otros al Cielo” (Elena de White, Los hechos de los apóstoles, p. 24)

PREGUNTAS PARA DIALOGAR:

PREGUNTA 1

Piensa en lo que significa que las primeras palabras de Dios a la humanidad caída no hayan sido: “¿Qué has hecho?”, o “¿Por qué me has desobedecido?” En lugar de esto, las primeras palabras fueron: “¿Dónde estás?” ¿Qué consuelo debería darnos esta verdad con respecto a la intención de Dios para con nosotros y nuestros seres queridos?

PREGUNTA 2

Piensa en lo que significa que Dios mismo, en la Persona de Jesús, viniera a este mundo para salvarnos. Cristo en la Cruz fue la máxima manifestación de Dios como un Dios misionero. ¿Qué nos dice esto acerca de su carácter?

PREGUNTA 3

La misión pertenece a Dios. Por lo tanto, él habilitará y capacitará a las personas para la tarea. A la luz de esta realidad, cuando te enfrentas a los desafíos de la evangelización mundial, ¿cómo puedes hacer frente a los sentimientos y las actitudes de incapacidad o miedo?

Repaso de la Lección

LECCIONES DE VIDA - Pr. Robert Costa

This page was produced by
Estudia la Biblia Hoy
estudialabibliahoy.com


Australia/Sydney : 20231007-152957 : 1626149781039 : 1696053575382

1/13