¡Espera en el Señor — Estudia la Biblia Hoy





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¡Espera en el Señor
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 CONTENIDO 

¡Espera en el Señor!

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA

Salmos 27:14
RVR1960 14 Aguarda a Jehová; Esfuérzate, y aliéntese tu corazón; Sí, espera a Jehová. NTV 14 Espera con paciencia al Señor; sé valiente y esforzado; sí, espera al Señor con paciencia.
Romanos 8:18-25
RVR1960 18 Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse. 19 Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. 20 Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza; 21 porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios. 22 Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora; 23 y no solo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo. 24 Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo? 25 Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos. NTV 18 Sin embargo, lo que ahora sufrimos no es nada comparado con la gloria que él nos revelará más adelante. 19 Pues toda la creación espera con anhelo el día futuro en que Dios revelará quiénes son verdaderamente sus hijos. 20 Contra su propia voluntad, toda la creación quedó sujeta a la maldición de Dios. Sin embargo, con gran esperanza, 21 la creación espera el día en que será liberada de la muerte y la descomposición, y se unirá a la gloria de los hijos de Dios. 22 Pues sabemos que, hasta el día de hoy, toda la creación gime de angustia como si tuviera dolores de parto; 23 y los creyentes también gemimos — aunque tenemos al Espíritu Santo en nosotros como una muestra anticipada de la gloria futura — porque anhelamos que nuestro cuerpo sea liberado del pecado y el sufrimiento. Nosotros también deseamos con una esperanza ferviente que llegue el día en que Dios nos dé todos nuestros derechos como sus hijos adoptivos, incluido el nuevo cuerpo que nos prometió. 24 Recibimos esa esperanza cuando fuimos salvos. (Si uno ya tiene algo, no necesita esperarlo; 25 pero si deseamos algo que todavía no tenemos, debemos esperar con paciencia y confianza).
Salmos 131
RVR1960 Cántico gradual; de David. 1 Jehová, no se ha envanecido mi corazón, ni mis ojos se enaltecieron; Ni anduve en grandezas, Ni en cosas demasiado sublimes para mí. 2 En verdad que me he comportado y he acallado mi alma Como un niño destetado de su madre; Como un niño destetado está mi alma. 3 Espera, oh Israel, en Jehová, Desde ahora y para siempre. NTV Cántico para los peregrinos que suben a Jerusalén. Salmo de David. 1 Señor, mi corazón no es orgulloso; mis ojos no son altivos. No me intereso en cuestiones demasiado grandes o impresionantes que no puedo asimilar. 2 En cambio, me he calmado y aquietado, como un niño destetado que ya no llora por la leche de su madre. Sí, tal como un niño destetado es mi alma en mi interior. 3 Oh Israel, pon tu esperanza en el Señor, ahora y siempre.
Mateo 18:3
RVR1960 3 y dijo: De cierto os digo, que si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos. NTV 3 Entonces dijo: — Les digo la verdad, a menos que se aparten de sus pecados y se vuelvan como niños, nunca entrarán en el reino del cielo.
Salmos 126
RVR1960 Cántico gradual. 1 Cuando Jehová hiciere volver la cautividad de Sion, Seremos como los que sueñan. 2 Entonces nuestra boca se llenará de risa, Y nuestra lengua de alabanza; Entonces dirán entre las naciones: Grandes cosas ha hecho Jehová con estos. 3 Grandes cosas ha hecho Jehová con nosotros; Estaremos alegres. 4 Haz volver nuestra cautividad, oh Jehová, Como los arroyos del Neguev. 5 Los que sembraron con lágrimas, con regocijo segarán. 6 Irá andando y llorando el que lleva la preciosa semilla; Mas volverá a venir con regocijo, trayendo sus gavillas. NTV Cántico para los peregrinos que suben a Jerusalén. 1 Cuando el Señor trajo a los desterrados de regreso a Jerusalén, ¡fue como un sueño! 2 Nos llenamos de risa y cantamos de alegría. Y las otras naciones dijeron: «Cuántas maravillas ha hecho el Señor por ellos». 3 ¡Así es, el Señor ha hecho maravillas por nosotros! ¡Qué alegría! 4 Restaura nuestro bienestar, Señor, como los arroyos renuevan el desierto. 5 Los que siembran con lágrimas cosecharán con gritos de alegría. 6 Lloran al ir sembrando sus semillas, pero regresan cantando cuando traen la cosecha.
Salmos 92
RVR1960 Salmo. Cántico para el día de reposo. 1 Bueno es alabarte, oh Jehová, Y cantar salmos a tu nombre, oh Altísimo; 2 Anunciar por la mañana tu misericordia, Y tu fidelidad cada noche, 3 En el decacordio y en el salterio, En tono suave con el arpa. 4 Por cuanto me has alegrado, oh Jehová, con tus obras; En las obras de tus manos me gozo. 5 ¡Cuán grandes son tus obras, oh Jehová! Muy profundos son tus pensamientos. 6 El hombre necio no sabe, Y el insensato no entiende esto. 7 Cuando brotan los impíos como la hierba, Y florecen todos los que hacen iniquidad, Es para ser destruidos eternamente. 8 Mas tú, Jehová, para siempre eres Altísimo. 9 Porque he aquí tus enemigos, oh Jehová, Porque he aquí, perecerán tus enemigos; Serán esparcidos todos los que hacen maldad. 10 Pero tú aumentarás mis fuerzas como las del búfalo; Seré ungido con aceite fresco. 11 Y mirarán mis ojos sobre mis enemigos; Oirán mis oídos de los que se levantaron contra mí, de los malignos. 12 El justo florecerá como la palmera; Crecerá como cedro en el Líbano. 13 Plantados en la casa de Jehová, En los atrios de nuestro Dios florecerán. 14 Aun en la vejez fructificarán; Estarán vigorosos y verdes, 15 Para anunciar que Jehová mi fortaleza es recto, Y que en él no hay injusticia. NTV Salmo. Cántico para entonar el día de descanso. 1 Es bueno dar gracias al Señor, cantar alabanzas al Altísimo. 2 Es bueno proclamar por la mañana tu amor inagotable y por la noche tu fidelidad, 3 al son de un instrumento de diez cuerdas, un arpa y la melodía de la lira. 4 Todo lo que has hecho por mí, Señor, ¡me emociona! Canto de alegría por todo lo que has hecho. 5 ¡Oh Señor, qué grandes son tus obras! Y qué profundos son tus pensamientos. 6 Solo un simplón no sabría y solamente un necio no entendería que 7 aunque los malvados broten como maleza y los malhechores florezcan, serán destruidos para siempre. 8 Tú, oh Señor, para siempre serás exaltado. 9 Tus enemigos, Señor, sin duda perecerán; todos los malhechores quedarán esparcidos. 10 Pero tú me has hecho fuerte como un buey salvaje; me has ungido con el mejor aceite. 11 Mis ojos vieron la caída de mis enemigos; mis oídos escucharon la derrota de mis perversos oponentes. 12 Pero los justos florecerán como palmeras y se harán fuertes como los cedros del Líbano; 13 trasplantados a la casa del Señor, florecen en los atrios de nuestro Dios. 14 Incluso en la vejez aún producirán fruto; seguirán verdes y llenos de vitalidad. 15 Declararán: «¡El Señor es justo! ¡Es mi roca! ¡No existe maldad en él! ».
Marcos 16:1-8
RVR1960 (Mt. 28.
1-10; Lc. 24.
1-12; Jn. 20.
1-10) 1 Cuando pasó el día de reposo, María Magdalena, María la madre de Jacobo, y Salomé, compraron especias aromáticas para ir a ungirle. 2 Y muy de mañana, el primer día de la semana, vinieron al sepulcro, ya salido el sol. 3 Pero decían entre sí: ¿Quién nos removerá la piedra de la entrada del sepulcro? 4 Pero cuando miraron, vieron removida la piedra, que era muy grande. 5 Y cuando entraron en el sepulcro, vieron a un joven sentado al lado derecho, cubierto de una larga ropa blanca; y se espantaron. 6 Mas él les dijo: No os asustéis; buscáis a Jesús nazareno, el que fue crucificado; ha resucitado, no está aquí; mirad el lugar en donde le pusieron. 7 Pero id, decid a sus discípulos, y a Pedro, que él va delante de vosotros a Galilea; allí le veréis, como os dijo. 8 Y ellas se fueron huyendo del sepulcro, porque les había tomado temblor y espanto; ni decían nada a nadie, porque tenían miedo.
NTV 1 El sábado al atardecer, cuando terminó el día de descanso, María Magdalena, Salomé y María, la madre de Santiago, fueron a comprar especias para el entierro, a fin de ungir el cuerpo de Jesús. 2 El domingo por la mañana muy temprano, justo al amanecer, fueron a la tumba. 3 En el camino, se preguntaban unas a otras: «¿Quién nos correrá la piedra de la entrada de la tumba? »; 4 pero cuando llegaron, se fijaron y vieron que la piedra, que era muy grande, ya estaba corrida. 5 Cuando entraron en la tumba, vieron a un joven vestido con un manto blanco, sentado al lado derecho. Las mujeres estaban asustadas, 6 pero el ángel les dijo: «No se alarmen. Ustedes buscan a Jesús de Nazaret, el que fue crucificado. ¡No está aquí! ¡Ha resucitado! Miren, aquí es donde pusieron su cuerpo. 7 Ahora vayan y cuéntenles a sus discípulos, incluido Pedro, que Jesús va delante de ustedes a Galilea. Allí lo verán, tal como les dijo antes de morir». 8 Las mujeres, desconcertadas, huyeron temblando de la tumba y no dijeron nada a nadie porque estaban muy asustadas. ----------[ Los manuscritos más antiguos de Marcos terminan en el versículo 16: 8. Otros manuscritos tardíos incluyen uno o ambos de los finales que aparecen a continuación ]. [ Final breve de Marcos ]Luego ellas informaron todo eso a Pedro y a sus compañeros brevemente. Tiempo después, Jesús mismo los envió del oriente al occidente con el sagrado e inagotable mensaje de salvación que da vida eterna. Amén. [ Final largo de Marcos ]
2 Pedro 1:19
RVR1960 19 Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones; NTV 19 Debido a esa experiencia, ahora confiamos aún más en el mensaje que proclamaron los profetas. Ustedes deben prestar mucha atención a lo que ellos escribieron, porque sus palabras son como una lámpara que brilla en un lugar oscuro hasta que el Día amanezca y Cristo, la Estrella de la Mañana, brille en el corazón de ustedes.

VERSÍCULO DE MEMORIA

Salmos 27:14
RVR1960 14 Aguarda a Jehová; Esfuérzate, y aliéntese tu corazón; Sí, espera a Jehová. NTV 14 Espera con paciencia al Señor; sé valiente y esforzado; sí, espera al Señor con paciencia.

SÁBADO — INTRODUCCIÓN

Hemos llegado a la última semana de este trimestre, en el que estudiamos los salmos. En este viaje espiritual, pasamos por la experiencia del sobrecogimiento ante el majestuoso Creador, Rey y Juez; por el gozo de la liberación divina, el perdón y la salvación; por momentos de entrega en el dolor y el lamento; y por las gloriosas promesas de la presencia eterna de Dios y el anhelo de la adoración perpetua y universal a Dios. Sin embargo, el viaje continúa mientras vivamos en la esperanza de la venida del Señor, cuando nuestro anhelo de Dios hallará su cumplimiento definitivo. Si hay una nota final que podamos extraer de los salmos, debería ser “espera en el Señor”.

Esperar en el Señor no es una espera ociosa ni desesperada. Al contrario, esperar en el Señor es un acto lleno de confianza y fe; una confianza y una fe que se revelan en la acción. Esperar en el Señor transforma nuestras noches tenebrosas con la expectación de la mañana radiante Salmos 30:5
RVR1960 5 Porque un momento será su ira, Pero su favor dura toda la vida. Por la noche durará el lloro, Y a la mañana vendrá la alegría. NTV 5 Pues su ira dura solo un instante, ¡pero su favor perdura toda una vida! El llanto podrá durar toda la noche, pero con la mañana llega la alegría.
Salmos 143:8
RVR1960 8 Hazme oír por la mañana tu misericordia, Porque en ti he confiado; Hazme saber el camino por donde ande, Porque a ti he elevado mi alma. NTV 8 Hazme oír cada mañana acerca de tu amor inagotable, porque en ti confío. Muéstrame por dónde debo andar, porque a ti me entrego.
Fortalece nuestro corazón con una esperanza y una paz renovadas. Nos motiva a trabajar con más ahínco al traer las gavillas de la abundante cosecha de los campos misioneros del Señor Salmos 126:6
RVR1960 6 Irá andando y llorando el que lleva la preciosa semilla; Mas volverá a venir con regocijo, trayendo sus gavillas. NTV 6 Lloran al ir sembrando sus semillas, pero regresan cantando cuando traen la cosecha.
Mateo 9:36-38
RVR1960 36 Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor. 37 Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos. 38 Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies. NTV 36 Cuando vio a las multitudes, les tuvo compasión, porque estaban confundidas y desamparadas, como ovejas sin pastor. 37 A sus discípulos les dijo: «La cosecha es grande, pero los obreros son pocos. 38 Así que oren al Señor que está a cargo de la cosecha; pídanle que envíe más obreros a sus campos».
Esperar en el Señor nunca nos avergonzará, sino que se recompensará con creces, porque el Señor es fiel a todas sus promesas Salmos 37:7-11
RVR1960 7 Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino, Por el hombre que hace maldades. 8 Deja la ira, y desecha el enojo; No te excites en manera alguna a hacer lo malo. 9 Porque los malignos serán destruidos, Pero los que esperan en Jehová, ellos heredarán la tierra. 10 Pues de aquí a poco no existirá el malo; Observarás su lugar, y no estará allí. 11 Pero los mansos heredarán la tierra, Y se recrearán con abundancia de paz. NTV 7 Quédate quieto en la presencia del Señor, y espera con paciencia a que él actúe. No te inquietes por la gente mala que prospera, ni te preocupes por sus perversas maquinaciones. 8 ¡Ya no sigas enojado! ¡Deja a un lado tu ira! No pierdas los estribos, que eso únicamente causa daño. 9 Pues los perversos serán destruidos, pero los que confían en el Señor poseerán la tierra. 10 Pronto los perversos desaparecerán; por más que los busques, no los encontrarás. 11 Los humildes poseerán la tierra y vivirán en paz y prosperidad.
Salmos 37:18
RVR1960 18 Conoce Jehová los días de los perfectos, Y la heredad de ellos será para siempre. NTV 18 Día a día el Señor cuida a los inocentes, y ellos recibirán una herencia que permanece para siempre.
Salmos 37:34
RVR1960 34 Espera en Jehová, y guarda su camino, Y él te exaltará para heredar la tierra; Cuando sean destruidos los pecadores, lo verás. NTV 34 Pon tu esperanza en el Señor y marcha con paso firme por su camino. Él te honrará al darte la tierra y verás destruidos a los perversos.
Salmos 71:1
RVR1960 1 En ti, oh Jehová, me he refugiado; No sea yo avergonzado jamás. NTV 1 Oh Señor, a ti acudo en busca de protección; no permitas que me avergüencen.
Salmos 119:137-138
RVR1960 Tsade 137 Justo eres tú, oh Jehová, Y rectos tus juicios. 138 Tus testimonios, que has recomendado, Son rectos y muy fieles. NTV Tsade 137 Oh Señor, tú eres recto, y tus ordenanzas son justas. 138 Tus leyes son perfectas y absolutamente confiables.

DOMINGO — El llamado a esperar

Lee Salmos 27:14
RVR1960 14 Aguarda a Jehová; Esfuérzate, y aliéntese tu corazón; Sí, espera a Jehová. NTV 14 Espera con paciencia al Señor; sé valiente y esforzado; sí, espera al Señor con paciencia.
Salmos 37:7
RVR1960 7 Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino, Por el hombre que hace maldades. NTV 7 Quédate quieto en la presencia del Señor, y espera con paciencia a que él actúe. No te inquietes por la gente mala que prospera, ni te preocupes por sus perversas maquinaciones.
Salmos 37:9
RVR1960 9 Porque los malignos serán destruidos, Pero los que esperan en Jehová, ellos heredarán la tierra. NTV 9 Pues los perversos serán destruidos, pero los que confían en el Señor poseerán la tierra.
Salmos 37:34
RVR1960 34 Espera en Jehová, y guarda su camino, Y él te exaltará para heredar la tierra; Cuando sean destruidos los pecadores, lo verás. NTV 34 Pon tu esperanza en el Señor y marcha con paso firme por su camino. Él te honrará al darte la tierra y verás destruidos a los perversos.
Salmos 39:7
RVR1960 7 Y ahora, Señor, ¿qué esperaré? Mi esperanza está en ti. NTV 7 Entonces, Señor, ¿dónde pongo mi esperanza? Mi única esperanza está en ti.
Salmos 40:1
RVR1960 (Sal. 70.
1-5)Al músico principal. Salmo de David. 1 Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor.
NTV Para el director del coro: salmo de David. 1 Con paciencia esperé que el Señor me ayudara, y él se fijó en mí y oyó mi clamor.
Salmos 69:6
RVR1960 6 No sean avergonzados por causa mía los que en ti confían, oh Señor Jehová de los ejércitos; No sean confundidos por mí los que te buscan, oh Dios de Israel. NTV 6 No dejes que los que confían en ti sean avergonzados por mi culpa, oh Señor Soberano de los Ejércitos Celestiales. No permitas que sean humillados por mi causa, oh Dios de Israel.
Gálatas 5:5
RVR1960 5 Pues nosotros por el Espíritu aguardamos por fe la esperanza de la justicia; NTV 5 Sin embargo, los que vivimos por el Espíritu esperamos con anhelo recibir por la fe la justicia que Dios nos ha prometido.
y Romanos 8:18-25
RVR1960 18 Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse. 19 Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. 20 Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza; 21 porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios. 22 Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora; 23 y no solo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo. 24 Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo? 25 Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos. NTV 18 Sin embargo, lo que ahora sufrimos no es nada comparado con la gloria que él nos revelará más adelante. 19 Pues toda la creación espera con anhelo el día futuro en que Dios revelará quiénes son verdaderamente sus hijos. 20 Contra su propia voluntad, toda la creación quedó sujeta a la maldición de Dios. Sin embargo, con gran esperanza, 21 la creación espera el día en que será liberada de la muerte y la descomposición, y se unirá a la gloria de los hijos de Dios. 22 Pues sabemos que, hasta el día de hoy, toda la creación gime de angustia como si tuviera dolores de parto; 23 y los creyentes también gemimos — aunque tenemos al Espíritu Santo en nosotros como una muestra anticipada de la gloria futura — porque anhelamos que nuestro cuerpo sea liberado del pecado y el sufrimiento. Nosotros también deseamos con una esperanza ferviente que llegue el día en que Dios nos dé todos nuestros derechos como sus hijos adoptivos, incluido el nuevo cuerpo que nos prometió. 24 Recibimos esa esperanza cuando fuimos salvos. (Si uno ya tiene algo, no necesita esperarlo; 25 pero si deseamos algo que todavía no tenemos, debemos esperar con paciencia y confianza).

Estos pasajes, ¿qué imploran que haga el pueblo de Dios?

Tal vez una de las mayores tensiones de la vida sea el estrés de la espera. No importa quiénes seamos, dónde vivamos o cuál sea nuestra posición en la vida, a veces, todos tenemos que esperar. Desde esperar en la fila de una tienda hasta esperar para oír un pronóstico médico; esperamos, y no siempre nos gusta hacerlo, ¿verdad?

¿Qué ocurre, entonces, cuando esperamos en Dios? La noción de esperar en el Señor no solamente se encuentra en Salmos, abunda en toda la Biblia. La palabra clave es perseverancia. La perseverancia es nuestro compromiso supremo de negarnos a sucumbir al miedo ante la desilusión de que, por alguna razón, Dios no vendrá por nosotros. El hijo leal de Dios espera, sabiendo con certeza que Dios es fiel; y los que esperan en él pueden confiar en que, si le entregamos nuestra situación, podemos estar seguros de que la resolverá para nuestro bien, aunque en ese momento no lo veamos necesariamente así.

Esperar en el Señor es más que simplemente aguantar. Es un profundo anhelo de Dios que se compara con la sed intensa en tierra seca Salmos 63:1
RVR1960 Salmo de David, cuando estaba en el desierto de Judá. 1 Dios, Dios mío eres tú; De madrugada te buscaré; Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela, En tierra seca y árida donde no hay aguas, NTV Salmo de David, acerca de cuando estaba en el desierto de Judá. 1 Oh Dios, tú eres mi Dios; de todo corazón te busco. Mi alma tiene sed de ti; todo mi cuerpo te anhela en esta tierra reseca y agotada donde no hay agua.
El salmista espera muchas bendiciones de Dios, pero su anhelo de acercarse a su Dios supera cualquier otro deseo y necesidad en la vida.

Como leemos en este sorprendente pasaje de Romanos, Dios y toda la Creación esperan la renovación del mundo y el bendito encuentro entre Dios y su pueblo en el tiempo del fin. Pablo escribe: “La creación aguarda con profundo anhelo que los hijos de Dios sean revelados” Romanos 8:19
RVR1960 19 Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. NTV 19 Pues toda la creación espera con anhelo el día futuro en que Dios revelará quiénes son verdaderamente sus hijos.

¡Qué promesa tan increíble!

No obstante, mientras esperamos la salvación definitiva y la reunión con Dios, aunque “todas las criaturas gimen a una, y a una sufren dolores como de parto” Romanos 8:22
RVR1960 22 Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora; NTV 22 Pues sabemos que, hasta el día de hoy, toda la creación gime de angustia como si tuviera dolores de parto;
el Señor habita con su pueblo ahora, por medio del Espíritu Santo.

Mientras tanto, se nos llama a dar testimonio Hechos 1:4-8
RVR1960 4 Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de mí. 5 Porque Juan ciertamente bautizó con agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días. 6 Entonces los que se habían reunido le preguntaron, diciendo: Señor, ¿restaurarás el reino a Israel en este tiempo? 7 Y les dijo: No os toca a vosotros saber los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad; 8 pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra. NTV 4 Una vez, mientras comía con ellos, les ordenó: «No se vayan de Jerusalén hasta que el Padre les envíe el regalo que les prometió, tal como les dije antes. 5 Juan bautizaba con agua, pero en unos cuantos días ustedes serán bautizados con el Espíritu Santo». 6 Así que mientras los apóstoles estaban con Jesús, le preguntaron con insistencia: — Señor, ¿ha llegado ya el tiempo de que liberes a Israel y restaures nuestro reino? 7 Él les contestó: — Solo el Padre tiene la autoridad para fijar esas fechas y tiempos, y a ustedes no les corresponde saberlo; 8 pero recibirán poder cuando el Espíritu Santo descienda sobre ustedes; y serán mis testigos, y le hablarán a la gente acerca de mí en todas partes: en Jerusalén, por toda Judea, en Samaria y hasta los lugares más lejanos de la tierra.
del Plan de Salvación, que concluirá con una nueva Creación. Esa nueva Creación, en última instancia, es lo que estamos esperando: el cumplimiento final de nuestras esperanzas como cristianos adventistas. El mismo nombre, Adventista, abarca la idea de la esperanza que aguardamos. Esperamos, pero sabemos que no es en vano. La muerte y la resurrección de Cristo, en su primera venida, es nuestra garantía de su segunda venida.

¿Qué cosas esperas ahora de Dios? ¿Cómo aprendemos a esperar con fe y confianza, especialmente cuando lo que pedimos aún no ha llegado?

LUNES — La paz de un niño destetado

Lee Salmos 131
RVR1960 Cántico gradual; de David. 1 Jehová, no se ha envanecido mi corazón, ni mis ojos se enaltecieron; Ni anduve en grandezas, Ni en cosas demasiado sublimes para mí. 2 En verdad que me he comportado y he acallado mi alma Como un niño destetado de su madre; Como un niño destetado está mi alma. 3 Espera, oh Israel, en Jehová, Desde ahora y para siempre. NTV Cántico para los peregrinos que suben a Jerusalén. Salmo de David. 1 Señor, mi corazón no es orgulloso; mis ojos no son altivos. No me intereso en cuestiones demasiado grandes o impresionantes que no puedo asimilar. 2 En cambio, me he calmado y aquietado, como un niño destetado que ya no llora por la leche de su madre. Sí, tal como un niño destetado es mi alma en mi interior. 3 Oh Israel, pon tu esperanza en el Señor, ahora y siempre.

¿Qué nos enseña este salmo acerca de nuestra relación con Dios?

El pueblo de Dios vive en un mundo que aflige a los fieles, un mundo lleno de tentaciones y dificultades para casi todos. Una renovada convicción de que es hijo de Dios y que depende de Dios para su vida consuela al salmista y lo lleva a confesar que su orgullo no tiene valor. Lo engañoso del orgullo es que hace que los orgullosos se vuelvan egocéntricos e incapaces de ver más allá de sí mismos. Así, el orgulloso se ciega ante la realidad superior de Dios.

En cambio, los justos elevan su vista a Dios Salmos 123:1-2
RVR1960 Cántico gradual. 1 A ti alcé mis ojos, A ti que habitas en los cielos. 2 He aquí, como los ojos de los siervos miran a la mano de sus señores, Y como los ojos de la sierva a la mano de su señora, Así nuestros ojos miran a Jehová nuestro Dios, Hasta que tenga misericordia de nosotros. NTV Cántico para los peregrinos que suben a Jerusalén. 1 Levanto mis ojos a ti, oh Dios, entronizado en el cielo. 2 Seguimos buscando la misericordia del Señor nuestro Dios, así como los sirvientes fijan los ojos en su amo y la esclava observa a su ama, atenta al más mínimo gesto.
El reconocimiento de la grandeza de Dios los hace humildes y libres del egoísmo y la vana ambición. El salmista confiesa que no busca “grandezas” ni “cosas demasiado sublimes” Salmos 131:1
RVR1960 Cántico gradual; de David. 1 Jehová, no se ha envanecido mi corazón, ni mis ojos se enaltecieron; Ni anduve en grandezas, Ni en cosas demasiado sublimes para mí. NTV Cántico para los peregrinos que suben a Jerusalén. Salmo de David. 1 Señor, mi corazón no es orgulloso; mis ojos no son altivos. No me intereso en cuestiones demasiado grandes o impresionantes que no puedo asimilar.
Estas expresiones describen las obras de Dios en el mundo que sobrepasan la comprensión humana. La ciencia moderna nos ha demostrado que incluso las cosas más “sencillas” pueden ser increíblemente complicadas y estar mucho más allá de nuestra comprensión, al menos por ahora. De hecho, hay una gran ironía: cuanto más aprendemos del mundo físico, mayores son los misterios que aparecen ante nosotros.

Mientras tanto, la metáfora de Salmos 131:2
RVR1960 2 En verdad que me he comportado y he acallado mi alma Como un niño destetado de su madre; Como un niño destetado está mi alma. NTV 2 En cambio, me he calmado y aquietado, como un niño destetado que ya no llora por la leche de su madre. Sí, tal como un niño destetado es mi alma en mi interior.
“como un niño destetado se aquieta en brazos de su madre”, es una poderosa imagen de alguien que encuentra la calma y que se tranquiliza ante el abrazo de Dios. Señala la relación de amor que un niño tiene con su madre en las distintas etapas de su vida.

Al “destetarnos” de las ambiciones insustanciales y del orgullo, Dios nos presenta el alimento sólido, que consiste en “hacer la voluntad del que me envió y acabar su obra” Juan 4:34
RVR1960 34 Jesús les dijo: Mi comida es que haga la voluntad del que me envió, y que acabe su obra. NTV 34 Entonces Jesús explicó: — Mi alimento consiste en hacer la voluntad de Dios, quien me envió, y en terminar su obra.
también Hebreos 5:12-14
RVR1960 12 Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido. 13 Y todo aquel que participa de la leche es inexperto en la palabra de justicia, porque es niño; 14 pero el alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal. NTV 12 Hace tanto que son creyentes que ya deberían estar enseñando a otros. En cambio, necesitan que alguien vuelva a enseñarles las cosas básicas de la palabra de Dios. Son como niños pequeños que necesitan leche y no pueden comer alimento sólido. 13 Pues el que se alimenta de leche sigue siendo bebé y no sabe cómo hacer lo correcto. 14 El alimento sólido es para los que son maduros, los que a fuerza de práctica están capacitados para distinguir entre lo bueno y lo malo.
La confianza infantil descrita en Salmos 131
RVR1960 Cántico gradual; de David. 1 Jehová, no se ha envanecido mi corazón, ni mis ojos se enaltecieron; Ni anduve en grandezas, Ni en cosas demasiado sublimes para mí. 2 En verdad que me he comportado y he acallado mi alma Como un niño destetado de su madre; Como un niño destetado está mi alma. 3 Espera, oh Israel, en Jehová, Desde ahora y para siempre. NTV Cántico para los peregrinos que suben a Jerusalén. Salmo de David. 1 Señor, mi corazón no es orgulloso; mis ojos no son altivos. No me intereso en cuestiones demasiado grandes o impresionantes que no puedo asimilar. 2 En cambio, me he calmado y aquietado, como un niño destetado que ya no llora por la leche de su madre. Sí, tal como un niño destetado es mi alma en mi interior. 3 Oh Israel, pon tu esperanza en el Señor, ahora y siempre.
es una fe madura que ha sido probada por las dificultades de la vida y que ha descubierto que Dios es fiel a su Palabra.

Al final, la atención del salmista se centra en el bienestar del pueblo de Dios. En definitiva, se nos llama a utilizar nuestra experiencia con Dios para fortalecer a su iglesia. Es decir, aquello que hemos aprendido personalmente, la fidelidad y la bondad de Dios, podemos compartirlo con otros que, por alguna razón, todavía luchan con su fe. Nuestro testimonio acerca de Cristo puede darse incluso dentro de la propia iglesia, donde muchos necesitan conocerlo personalmente.

“Les aseguro que si no cambian y se vuelven como niños, jamás entrarán en el reino de los cielos” Mateo 18:3
RVR1960 3 y dijo: De cierto os digo, que si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos. NTV 3 Entonces dijo: — Les digo la verdad, a menos que se aparten de sus pecados y se vuelvan como niños, nunca entrarán en el reino del cielo.
¿Qué nos está diciendo Jesús aquí? ¿Qué implica esta idea?

MARTES — Trayendo sus gavillas

Lee Salmos 126
RVR1960 Cántico gradual. 1 Cuando Jehová hiciere volver la cautividad de Sion, Seremos como los que sueñan. 2 Entonces nuestra boca se llenará de risa, Y nuestra lengua de alabanza; Entonces dirán entre las naciones: Grandes cosas ha hecho Jehová con estos. 3 Grandes cosas ha hecho Jehová con nosotros; Estaremos alegres. 4 Haz volver nuestra cautividad, oh Jehová, Como los arroyos del Neguev. 5 Los que sembraron con lágrimas, con regocijo segarán. 6 Irá andando y llorando el que lleva la preciosa semilla; Mas volverá a venir con regocijo, trayendo sus gavillas. NTV Cántico para los peregrinos que suben a Jerusalén. 1 Cuando el Señor trajo a los desterrados de regreso a Jerusalén, ¡fue como un sueño! 2 Nos llenamos de risa y cantamos de alegría. Y las otras naciones dijeron: «Cuántas maravillas ha hecho el Señor por ellos». 3 ¡Así es, el Señor ha hecho maravillas por nosotros! ¡Qué alegría! 4 Restaura nuestro bienestar, Señor, como los arroyos renuevan el desierto. 5 Los que siembran con lágrimas cosecharán con gritos de alegría. 6 Lloran al ir sembrando sus semillas, pero regresan cantando cuando traen la cosecha.

¿Qué le da fuerza y esperanza al pueblo de Dios? ¿Qué se dice aquí, en este contexto, que podamos aplicar a nuestra vida hoy?

Las liberaciones milagrosas del Señor en el pasado son una fuente inagotable de inspiración para el pueblo de Dios y su fuente de esperanza para el futuro. La liberación del pasado fue tan grande que podría describirse como un sueño hecho realidad Isaías 29:7-8
RVR1960 7 Y será como sueño de visión nocturna la multitud de todas las naciones que pelean contra Ariel, y todos los que pelean contra ella y su fortaleza, y los que la ponen en apretura. 8 Y les sucederá como el que tiene hambre y sueña, y le parece que come, pero cuando despierta, su estómago está vacío; o como el que tiene sed y sueña, y le parece que bebe, pero cuando despierta, se halla cansado y sediento; así será la multitud de todas las naciones que pelearán contra el monte de Sion. NTV 7 Todas las naciones que pelean contra Jerusalén ¡desaparecerán como un sueño! Los que atacan sus murallas se esfumarán como una visión en la noche. 8 La persona con hambre sueña con comida, pero se despierta todavía con hambre. La persona con sed sueña con beber, pero cuando llega la mañana, sigue desfallecida de sed. Así será con tus enemigos, con los que ataquen al monte Sion».
Observa que la generación que alaba al Señor en Salmos 126
RVR1960 Cántico gradual. 1 Cuando Jehová hiciere volver la cautividad de Sion, Seremos como los que sueñan. 2 Entonces nuestra boca se llenará de risa, Y nuestra lengua de alabanza; Entonces dirán entre las naciones: Grandes cosas ha hecho Jehová con estos. 3 Grandes cosas ha hecho Jehová con nosotros; Estaremos alegres. 4 Haz volver nuestra cautividad, oh Jehová, Como los arroyos del Neguev. 5 Los que sembraron con lágrimas, con regocijo segarán. 6 Irá andando y llorando el que lleva la preciosa semilla; Mas volverá a venir con regocijo, trayendo sus gavillas. NTV Cántico para los peregrinos que suben a Jerusalén. 1 Cuando el Señor trajo a los desterrados de regreso a Jerusalén, ¡fue como un sueño! 2 Nos llenamos de risa y cantamos de alegría. Y las otras naciones dijeron: «Cuántas maravillas ha hecho el Señor por ellos». 3 ¡Así es, el Señor ha hecho maravillas por nosotros! ¡Qué alegría! 4 Restaura nuestro bienestar, Señor, como los arroyos renuevan el desierto. 5 Los que siembran con lágrimas cosecharán con gritos de alegría. 6 Lloran al ir sembrando sus semillas, pero regresan cantando cuando traen la cosecha.
por la liberación del cautiverio de su pueblo en el pasado Salmos 126:1
RVR1960 Cántico gradual. 1 Cuando Jehová hiciere volver la cautividad de Sion, Seremos como los que sueñan. NTV Cántico para los peregrinos que suben a Jerusalén. 1 Cuando el Señor trajo a los desterrados de regreso a Jerusalén, ¡fue como un sueño!
está actualmente en cautiverio Salmos 126:4
RVR1960 4 Haz volver nuestra cautividad, oh Jehová, Como los arroyos del Neguev. NTV 4 Restaura nuestro bienestar, Señor, como los arroyos renuevan el desierto.

Sin embargo, el gozo y el alivio del pasado se reviven mediante cantos y se vuelven propios en la experiencia actual. Las nuevas generaciones mantienen viva la historia bíblica al considerarse presentes entre quienes presenciaron los acontecimientos de primera mano. Por lo tanto, una fe viva valora los grandes hechos de Dios por su pueblo en el pasado como algo que el Señor ha hecho por nosotros, y no simplemente como cosas que el Señor hizo por ellos (las generaciones pasadas de creyentes).

De hecho, el recuerdo del pasado estimula una esperanza renovada para el presente. La imagen de “los arroyos del desierto” Salmos 126:4
RVR1960 4 Haz volver nuestra cautividad, oh Jehová, Como los arroyos del Neguev. NTV 4 Restaura nuestro bienestar, Señor, como los arroyos renuevan el desierto.
es una poderosa metáfora de la acción repentina y poderosa de Dios en favor de su pueblo. El sur de Judá era una región árida y desértica. Los arroyos se formaban de repente y se llenaban de aguas caudalosas tras las fuertes lluvias de la estación lluviosa. Las lluvias tempranas y las tardías desempeñaban un papel crucial en el éxito del año agrícola Deuteronomio 11:14
RVR1960 14 yo daré la lluvia de vuestra tierra a su tiempo, la temprana y la tardía; y recogerás tu grano, tu vino y tu aceite. NTV 14 él mandará las lluvias propias de cada estación — las tempranas y las tardías — , para que puedas juntar las cosechas de granos, el vino nuevo y el aceite de oliva.
Deuteronomio 28:12
RVR1960 12 Te abrirá Jehová su buen tesoro, el cielo, para enviar la lluvia a tu tierra en su tiempo, y para bendecir toda obra de tus manos. Y prestarás a muchas naciones, y tú no pedirás prestado. NTV 12 El Señor enviará lluvias en el tiempo oportuno desde su inagotable tesoro en los cielos y bendecirá todo tu trabajo. Tú prestarás a muchas naciones, pero jamás tendrás necesidad de pedirles prestado.
Del mismo modo, la imagen de sembrar con lágrimas y cosechar con regocijo Salmos 126:5-6
RVR1960 5 Los que sembraron con lágrimas, con regocijo segarán. 6 Irá andando y llorando el que lleva la preciosa semilla; Mas volverá a venir con regocijo, trayendo sus gavillas. NTV 5 Los que siembran con lágrimas cosecharán con gritos de alegría. 6 Lloran al ir sembrando sus semillas, pero regresan cantando cuando traen la cosecha.
es una poderosa promesa de la conducción divina desde un presente difícil hacia un futuro feliz.

El final de la época de cosecha era el momento en que las antiguas peregrinaciones hebreas llevaban los frutos de la temporada al Templo de Dios en Jerusalén Éxodo 34:22
RVR1960 22 También celebrarás la fiesta de las semanas, la de las primicias de la siega del trigo, y la fiesta de la cosecha a la salida del año. NTV 22 »Deberás celebrar el Festival de la Cosecha, con los primeros frutos de la cosecha del trigo, y celebrar también el Festival de la Cosecha Final cuando termine la temporada de la cosecha.
Éxodo 34:26
RVR1960 26 Las primicias de los primeros frutos de tu tierra llevarás a la casa de Jehová tu Dios. No cocerás el cabrito en la leche de su madre. NTV 26 »Cuando recojas tus cosechas, lleva a la casa del Señor tu Dios lo mejor de la primera cosecha. »No cocines a un cabrito en la leche de su madre.
El motivo de la cosecha brindaba una potente lección espiritual al pueblo de aquella época. Del mismo modo que el duro trabajo de sembrar y cuidar los campos, huertos y viñedos se ve recompensado con la alegría de una cosecha abundante, las pruebas actuales del pueblo de Dios se verán coronadas por el gozo de la salvación en el tiempo del fin. La imagen de la gran cosecha apunta a la restauración del Reino de Dios en la Tierra en la segunda venida de Cristo Amós 9:13-15
RVR1960 13 He aquí vienen días, dice Jehová, en que el que ara alcanzará al segador, y el pisador de las uvas al que lleve la simiente; y los montes destilarán mosto, y todos los collados se derretirán. 14 Y traeré del cautiverio a mi pueblo Israel, y edificarán ellos las ciudades asoladas, y las habitarán; plantarán viñas, y beberán el vino de ellas, y harán huertos, y comerán el fruto de ellos. 15 Pues los plantaré sobre su tierra, y nunca más serán arrancados de su tierra que yo les di, ha dicho Jehová Dios tuyo. NTV 13 «Llegará el día — dice el Señor — en el que el grano y las uvas crecerán más rápido de lo que puedan ser cosechados. ¡Entonces los viñedos en las terrazas de las colinas de Israel destilarán vino dulce! 14 Traeré a mi pueblo Israel de su cautiverio en tierras lejanas; reedificarán sus ciudades que están en ruinas y nuevamente vivirán en ellas. Plantarán viñedos y huertos; comerán sus cosechas y beberán su vino. 15 Los plantaré firmemente allí en su propia tierra. Nunca más serán desarraigados de la tierra que yo les di», dice el Señor tu Dios.
Mateo 9:37
RVR1960 37 Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos. NTV 37 A sus discípulos les dijo: «La cosecha es grande, pero los obreros son pocos.
Sin embargo, aquí también surge el tema de la espera. Al igual que con la cosecha, debemos esperar para ver el fruto y los resultados de nuestra labor.

Piensa en algunas ocasiones en las que hayas visto al Señor obrando clara e inequívocamente en tu vida o en la de los demás. ¿Cómo puedes renovar tu esperanza con esas experiencias para lo que quizás estés viviendo ahora?

MIERCOLES — Esperar en el descanso sabático de Dios

Lee Salmos 92
RVR1960 Salmo. Cántico para el día de reposo. 1 Bueno es alabarte, oh Jehová, Y cantar salmos a tu nombre, oh Altísimo; 2 Anunciar por la mañana tu misericordia, Y tu fidelidad cada noche, 3 En el decacordio y en el salterio, En tono suave con el arpa. 4 Por cuanto me has alegrado, oh Jehová, con tus obras; En las obras de tus manos me gozo. 5 ¡Cuán grandes son tus obras, oh Jehová! Muy profundos son tus pensamientos. 6 El hombre necio no sabe, Y el insensato no entiende esto. 7 Cuando brotan los impíos como la hierba, Y florecen todos los que hacen iniquidad, Es para ser destruidos eternamente. 8 Mas tú, Jehová, para siempre eres Altísimo. 9 Porque he aquí tus enemigos, oh Jehová, Porque he aquí, perecerán tus enemigos; Serán esparcidos todos los que hacen maldad. 10 Pero tú aumentarás mis fuerzas como las del búfalo; Seré ungido con aceite fresco. 11 Y mirarán mis ojos sobre mis enemigos; Oirán mis oídos de los que se levantaron contra mí, de los malignos. 12 El justo florecerá como la palmera; Crecerá como cedro en el Líbano. 13 Plantados en la casa de Jehová, En los atrios de nuestro Dios florecerán. 14 Aun en la vejez fructificarán; Estarán vigorosos y verdes, 15 Para anunciar que Jehová mi fortaleza es recto, Y que en él no hay injusticia. NTV Salmo. Cántico para entonar el día de descanso. 1 Es bueno dar gracias al Señor, cantar alabanzas al Altísimo. 2 Es bueno proclamar por la mañana tu amor inagotable y por la noche tu fidelidad, 3 al son de un instrumento de diez cuerdas, un arpa y la melodía de la lira. 4 Todo lo que has hecho por mí, Señor, ¡me emociona! Canto de alegría por todo lo que has hecho. 5 ¡Oh Señor, qué grandes son tus obras! Y qué profundos son tus pensamientos. 6 Solo un simplón no sabría y solamente un necio no entendería que 7 aunque los malvados broten como maleza y los malhechores florezcan, serán destruidos para siempre. 8 Tú, oh Señor, para siempre serás exaltado. 9 Tus enemigos, Señor, sin duda perecerán; todos los malhechores quedarán esparcidos. 10 Pero tú me has hecho fuerte como un buey salvaje; me has ungido con el mejor aceite. 11 Mis ojos vieron la caída de mis enemigos; mis oídos escucharon la derrota de mis perversos oponentes. 12 Pero los justos florecerán como palmeras y se harán fuertes como los cedros del Líbano; 13 trasplantados a la casa del Señor, florecen en los atrios de nuestro Dios. 14 Incluso en la vejez aún producirán fruto; seguirán verdes y llenos de vitalidad. 15 Declararán: «¡El Señor es justo! ¡Es mi roca! ¡No existe maldad en él! ».

¿Qué dos aspectos del sábado se destacan en este canto acerca del día de reposo?

La alabanza a Dios por las grandes obras de sus manos Salmos 92:4-5
RVR1960 4 Por cuanto me has alegrado, oh Jehová, con tus obras; En las obras de tus manos me gozo. 5 ¡Cuán grandes son tus obras, oh Jehová! Muy profundos son tus pensamientos. NTV 4 Todo lo que has hecho por mí, Señor, ¡me emociona! Canto de alegría por todo lo que has hecho. 5 ¡Oh Señor, qué grandes son tus obras! Y qué profundos son tus pensamientos.
y la descripción edénica de los justos Salmos 92:12-14
RVR1960 12 El justo florecerá como la palmera; Crecerá como cedro en el Líbano. 13 Plantados en la casa de Jehová, En los atrios de nuestro Dios florecerán. 14 Aun en la vejez fructificarán; Estarán vigorosos y verdes, NTV 12 Pero los justos florecerán como palmeras y se harán fuertes como los cedros del Líbano; 13 trasplantados a la casa del Señor, florecen en los atrios de nuestro Dios. 14 Incluso en la vejez aún producirán fruto; seguirán verdes y llenos de vitalidad.
señalan claramente a la Creación, el primer aspecto que conmemora el sábado. El salmo también ensalza al Señor por su victoria sobre los enemigos, como Dios de justicia Salmos 92:7-15
RVR1960 7 Cuando brotan los impíos como la hierba, Y florecen todos los que hacen iniquidad, Es para ser destruidos eternamente. 8 Mas tú, Jehová, para siempre eres Altísimo. 9 Porque he aquí tus enemigos, oh Jehová, Porque he aquí, perecerán tus enemigos; Serán esparcidos todos los que hacen maldad. 10 Pero tú aumentarás mis fuerzas como las del búfalo; Seré ungido con aceite fresco. 11 Y mirarán mis ojos sobre mis enemigos; Oirán mis oídos de los que se levantaron contra mí, de los malignos. 12 El justo florecerá como la palmera; Crecerá como cedro en el Líbano. 13 Plantados en la casa de Jehová, En los atrios de nuestro Dios florecerán. 14 Aun en la vejez fructificarán; Estarán vigorosos y verdes, 15 Para anunciar que Jehová mi fortaleza es recto, Y que en él no hay injusticia. NTV 7 aunque los malvados broten como maleza y los malhechores florezcan, serán destruidos para siempre. 8 Tú, oh Señor, para siempre serás exaltado. 9 Tus enemigos, Señor, sin duda perecerán; todos los malhechores quedarán esparcidos. 10 Pero tú me has hecho fuerte como un buey salvaje; me has ungido con el mejor aceite. 11 Mis ojos vieron la caída de mis enemigos; mis oídos escucharon la derrota de mis perversos oponentes. 12 Pero los justos florecerán como palmeras y se harán fuertes como los cedros del Líbano; 13 trasplantados a la casa del Señor, florecen en los atrios de nuestro Dios. 14 Incluso en la vejez aún producirán fruto; seguirán verdes y llenos de vitalidad. 15 Declararán: «¡El Señor es justo! ¡Es mi roca! ¡No existe maldad en él! ».
y refuerza así la segunda faceta del sábado: la redención del mal Deuteronomio 5:12-15
RVR1960 12 Guardarás el día de reposo para santificarlo, como Jehová tu Dios te ha mandado. 13 Seis días trabajarás, y harás toda tu obra; 14 mas el séptimo día es reposo a Jehová tu Dios; ninguna obra harás tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu sierva, ni tu buey, ni tu asno, ni ningún animal tuyo, ni el extranjero que está dentro de tus puertas, para que descanse tu siervo y tu sierva como tú. 15 Acuérdate que fuiste siervo en tierra de Egipto, y que Jehová tu Dios te sacó de allá con mano fuerte y brazo extendido; por lo cual Jehová tu Dios te ha mandado que guardes el día de reposo. NTV 12 »Guarda el día de descanso al mantenerlo santo, tal como te lo ordenó el Señor tu Dios. 13 Tienes seis días en la semana para hacer tu trabajo habitual, 14 pero el séptimo día es de descanso y está dedicado al Señor tu Dios. Ese día, ningún miembro de tu casa hará trabajo alguno. Esto se refiere a ti, a tus hijos e hijas, tus siervos y siervas, tus bueyes, burros y demás animales, y también incluye a los extranjeros que vivan entre ustedes. Todos tus criados y criadas deberán descansar igual que tú. 15 Recuerda que tú también fuiste esclavo en Egipto y que el Señor tu Dios te sacó de allí con mano fuerte y brazo poderoso. Por esa razón, el Señor tu Dios te ordenó descansar el séptimo día.
De esta manera, Salmo 92 ensalza a Dios por su Creación en el pasado y por sostener el mundo en la actualidad, y apunta a la esperanza final de la paz y el orden divinos por toda la eternidad.

El pueblo puede disfrutar del descanso sabático porque Dios es el “Altísimo” Salmos 92:1
RVR1960 Salmo. Cántico para el día de reposo. 1 Bueno es alabarte, oh Jehová, Y cantar salmos a tu nombre, oh Altísimo; NTV Salmo. Cántico para entonar el día de descanso. 1 Es bueno dar gracias al Señor, cantar alabanzas al Altísimo.
su posición superior (en las alturas) le da una ventaja sin igual sobre sus enemigos.

Sin embargo, aunque es el Altísimo, el Señor no duda en descender para rescatar a quienes lo invocan. La obra de creación del Señor y, sobre todo, la redención de esa Creación, deberían inspirar a la gente a adorar a Dios y a amarlo. A fin de cuentas, vivir en una Creación caída, sin esperanza de redención, no es algo que nos entusiasme especialmente. Amamos, sufrimos, morimos... sin ninguna esperanza. Por eso, alabamos al Señor no solamente como Creador, sino también como Redentor.

El “aceite fresco” transmite la idea de la renovada devoción del salmista por servir a Dios como su siervo reconsagrado Salmos 92:10
RVR1960 10 Pero tú aumentarás mis fuerzas como las del búfalo; Seré ungido con aceite fresco. NTV 10 Pero tú me has hecho fuerte como un buey salvaje; me has ungido con el mejor aceite.
La unción con aceite se hacía para consagrar a personas elegidas como sacerdotes y reyes Éxodo 40:15
RVR1960 15 y los ungirás, como ungiste a su padre, y serán mis sacerdotes, y su unción les servirá por sacerdocio perpetuo, por sus generaciones. NTV 15 Úngelos como ungiste a su padre, para que ellos también me sirvan como sacerdotes. Al ungirlos, los descendientes de Aarón quedan apartados para el sacerdocio por siempre, de generación en generación».
1 Samuel 10:1
RVR1960 1 Tomando entonces Samuel una redoma de aceite, la derramó sobre su cabeza, y lo besó, y le dijo: ¿No te ha ungido Jehová por príncipe sobre su pueblo Israel? NTV 1 Entonces Samuel tomó un frasco de aceite de oliva y lo derramó sobre la cabeza de Saúl. Besó a Saúl y dijo: «Hago esto porque el Señor te ha designado para que gobiernes a Israel, su posesión más preciada.
Sin embargo, el salmista eligió una palabra hebrea inusual, balal, para describir su unción, que no representa típicamente la unción de los siervos de Dios, sino que denota la “mezcla” de aceite con otras partes del sacrificio Éxodo 29:2
RVR1960 2 y panes sin levadura, y tortas sin levadura amasadas con aceite, y hojaldres sin levadura untadas con aceite; las harás de flor de harina de trigo. NTV 2 Luego, con harina de trigo selecta y sin levadura, prepara panes, panes planos mezclados con aceite de oliva y obleas untadas con aceite.
Levítico 2:4-5
RVR1960 4 Cuando ofrecieres ofrenda cocida en horno, será de tortas de flor de harina sin levadura amasadas con aceite, y hojaldres sin levadura untadas con aceite. 5 Mas si ofrecieres ofrenda de sartén, será de flor de harina sin levadura, amasada con aceite, NTV 4 »Si la ofrenda es de grano cocido al horno, debe ser de harina selecta, pero sin levadura. Se puede presentar en la forma de panes planos mezclados con aceite de oliva, o de obleas untadas con aceite de oliva. 5 Si la ofrenda de grano se cocina en un sartén, debe ser de harina selecta humedecida con aceite de oliva, pero sin levadura.
El uso exclusivo del balal por parte del salmista implica que este desea presentarse a sí mismo como sacrificio vivo ante el Señor y consagrar todo su ser a Dios Romanos 12:1
RVR1960 1 Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional. NTV 1 Por lo tanto, amados hermanos, les ruego que entreguen su cuerpo a Dios por todo lo que él ha hecho a favor de ustedes. Que sea un sacrificio vivo y santo, la clase de sacrificio que a él le agrada. Esa es la verdadera forma de adorarlo.

No es sorprendente encontrar pensamientos acerca de la consagración en un salmo dedicado al sábado, porque el sábado es la señal de que el Señor santifica a su pueblo Éxodo 31:13
RVR1960 13 Tú hablarás a los hijos de Israel, diciendo: En verdad vosotros guardaréis mis días de reposo; porque es señal entre mí y vosotros por vuestras generaciones, para que sepáis que yo soy Jehová que os santifico. NTV 13 «Diles a los israelitas: “Asegúrense de guardar mi día de descanso, porque el día de descanso es una señal del pacto entre ustedes y yo de generación en generación. Se ha establecido para que sepan que yo soy el Señor, quien los hace santos.
Las imágenes de palmeras y cedros del Líbano representan al pueblo de Dios que crece en la fe y en la verdadera apreciación de los maravillosos propósitos y el amor de Dios. El sábado es la señal del Pacto eterno del Señor con su pueblo Ezequiel 20:20
RVR1960 20 y santificad mis días de reposo, y sean por señal entre mí y vosotros, para que sepáis que yo soy Jehová vuestro Dios. NTV 20 y mantengan santos mis días de descanso, porque son una señal para recordarles que yo soy el Señor su Dios’.
Por lo tanto, el descanso sabático es esencial para el pueblo de Dios, porque lo capacita para esperar confiadamente en que el Señor cumplirá todas las promesas de su Pacto Hebreos 4:1-10
RVR1960 1 Temamos, pues, no sea que permaneciendo aún la promesa de entrar en su reposo, alguno de vosotros parezca no haberlo alcanzado. 2 Porque también a nosotros se nos ha anunciado la buena nueva como a ellos; pero no les aprovechó el oír la palabra, por no ir acompañada de fe en los que la oyeron. 3 Pero los que hemos creído entramos en el reposo, de la manera que dijo: Por tanto, juré en mi ira, No entrarán en mi reposo; aunque las obras suyas estaban acabadas desde la fundación del mundo. 4 Porque en cierto lugar dijo así del séptimo día: Y reposó Dios de todas sus obras en el séptimo día. 5 Y otra vez aquí: No entrarán en mi reposo. 6 Por lo tanto, puesto que falta que algunos entren en él, y aquellos a quienes primero se les anunció la buena nueva no entraron por causa de desobediencia, 7 otra vez determina un día: Hoy, diciendo después de tanto tiempo, por medio de David, como se dijo: Si oyereis hoy su voz, No endurezcáis vuestros corazones. 8 Porque si Josué les hubiera dado el reposo, no hablaría después de otro día. 9 Por tanto, queda un reposo para el pueblo de Dios. 10 Porque el que ha entrado en su reposo, también ha reposado de sus obras, como Dios de las suyas. NTV 1 Todavía sigue vigente la promesa que hizo Dios de entrar en su descanso; por lo tanto, debemos temblar de miedo ante la idea de que alguno de ustedes no llegue a alcanzarlo. 2 Pues esta buena noticia — del descanso que Dios ha preparado — se nos ha anunciado tanto a ellos como a nosotros, pero a ellos no les sirvió de nada porque no tuvieron la fe de los que escucharon a Dios. 3 Pues solo los que creemos podemos entrar en su descanso. En cuanto a los demás, Dios dijo: «En mi enojo juré: “Ellos nunca entrarán en mi lugar de descanso”», si bien ese descanso está preparado desde que él hizo el mundo. 4 Sabemos que está preparado debido al pasaje en las Escrituras que menciona el séptimo día: «Cuando llegó el séptimo día, Dios descansó de toda su labor». 5 Pero en el otro pasaje Dios dijo: «Ellos nunca entrarán en mi lugar de descanso». 6 Así que el descanso de Dios está disponible para que la gente entre, pero los primeros en oír esta buena noticia no entraron, porque desobedecieron a Dios. 7 Entonces Dios fijó otro tiempo para entrar en su descanso, y ese tiempo es hoy. Lo anunció mucho más tarde por medio de David en las palabras que ya se han citado: «Cuando oigan hoy su voz no endurezcan el corazón». 8 Ahora bien, si Josué hubiera logrado darles ese descanso, Dios no habría hablado de otro día de descanso aún por venir. 9 Así que todavía hay un descanso especial en espera para el pueblo de Dios. 10 Pues todos los que han entrado en el descanso de Dios han descansado de su trabajo, tal como Dios descansó del suyo después de crear el mundo.

Vuelve a leer Salmos 92
RVR1960 Salmo. Cántico para el día de reposo. 1 Bueno es alabarte, oh Jehová, Y cantar salmos a tu nombre, oh Altísimo; 2 Anunciar por la mañana tu misericordia, Y tu fidelidad cada noche, 3 En el decacordio y en el salterio, En tono suave con el arpa. 4 Por cuanto me has alegrado, oh Jehová, con tus obras; En las obras de tus manos me gozo. 5 ¡Cuán grandes son tus obras, oh Jehová! Muy profundos son tus pensamientos. 6 El hombre necio no sabe, Y el insensato no entiende esto. 7 Cuando brotan los impíos como la hierba, Y florecen todos los que hacen iniquidad, Es para ser destruidos eternamente. 8 Mas tú, Jehová, para siempre eres Altísimo. 9 Porque he aquí tus enemigos, oh Jehová, Porque he aquí, perecerán tus enemigos; Serán esparcidos todos los que hacen maldad. 10 Pero tú aumentarás mis fuerzas como las del búfalo; Seré ungido con aceite fresco. 11 Y mirarán mis ojos sobre mis enemigos; Oirán mis oídos de los que se levantaron contra mí, de los malignos. 12 El justo florecerá como la palmera; Crecerá como cedro en el Líbano. 13 Plantados en la casa de Jehová, En los atrios de nuestro Dios florecerán. 14 Aun en la vejez fructificarán; Estarán vigorosos y verdes, 15 Para anunciar que Jehová mi fortaleza es recto, Y que en él no hay injusticia. NTV Salmo. Cántico para entonar el día de descanso. 1 Es bueno dar gracias al Señor, cantar alabanzas al Altísimo. 2 Es bueno proclamar por la mañana tu amor inagotable y por la noche tu fidelidad, 3 al son de un instrumento de diez cuerdas, un arpa y la melodía de la lira. 4 Todo lo que has hecho por mí, Señor, ¡me emociona! Canto de alegría por todo lo que has hecho. 5 ¡Oh Señor, qué grandes son tus obras! Y qué profundos son tus pensamientos. 6 Solo un simplón no sabría y solamente un necio no entendería que 7 aunque los malvados broten como maleza y los malhechores florezcan, serán destruidos para siempre. 8 Tú, oh Señor, para siempre serás exaltado. 9 Tus enemigos, Señor, sin duda perecerán; todos los malhechores quedarán esparcidos. 10 Pero tú me has hecho fuerte como un buey salvaje; me has ungido con el mejor aceite. 11 Mis ojos vieron la caída de mis enemigos; mis oídos escucharon la derrota de mis perversos oponentes. 12 Pero los justos florecerán como palmeras y se harán fuertes como los cedros del Líbano; 13 trasplantados a la casa del Señor, florecen en los atrios de nuestro Dios. 14 Incluso en la vejez aún producirán fruto; seguirán verdes y llenos de vitalidad. 15 Declararán: «¡El Señor es justo! ¡Es mi roca! ¡No existe maldad en él! ».
¿Qué gran esperanza se nos ofrece allí, y cómo podemos, incluso ahora mismo, consolarnos con lo que dice?

JUEVES — La alegría llega por la mañana

Lee Salmos 5:3
RVR1960 3 Oh Jehová, de mañana oirás mi voz; De mañana me presentaré delante de ti, y esperaré. NTV 3 Señor, escucha mi voz por la mañana; cada mañana llevo a ti mis peticiones y quedo a la espera.
Salmos 30:5
RVR1960 5 Porque un momento será su ira, Pero su favor dura toda la vida. Por la noche durará el lloro, Y a la mañana vendrá la alegría. NTV 5 Pues su ira dura solo un instante, ¡pero su favor perdura toda una vida! El llanto podrá durar toda la noche, pero con la mañana llega la alegría.
Salmos 49:14
RVR1960 14 Como a rebaños que son conducidos al Seol, La muerte los pastoreará, Y los rectos se enseñorearán de ellos por la mañana; Se consumirá su buen parecer, y el Seol será su morada. NTV 14 Como ovejas, son llevados a la tumba, donde la muerte será su pastor. Por la mañana, los justos gobernarán sobre ellos. Sus cuerpos se pudrirán en la tumba, lejos de sus grandiosas propiedades.
Salmos 59:16
RVR1960 16 Pero yo cantaré de tu poder, Y alabaré de mañana tu misericordia; Porque has sido mi amparo Y refugio en el día de mi angustia. NTV 16 En cuanto a mí, yo cantaré de tu poder; cada mañana cantaré con alegría acerca de tu amor inagotable. Pues tú has sido mi refugio, un lugar seguro cuando estoy angustiado.
Salmos 92:2
RVR1960 2 Anunciar por la mañana tu misericordia, Y tu fidelidad cada noche, NTV 2 Es bueno proclamar por la mañana tu amor inagotable y por la noche tu fidelidad,
Salmos 119:147
RVR1960 147 Me anticipé al alba, y clamé; Esperé en tu palabra. NTV 147 Me levanto temprano, antes de que salga el sol; clamo en busca de ayuda y pongo mi esperanza en tus palabras.
2 Pedro 1:19
RVR1960 19 Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones; NTV 19 Debido a esa experiencia, ahora confiamos aún más en el mensaje que proclamaron los profetas. Ustedes deben prestar mucha atención a lo que ellos escribieron, porque sus palabras son como una lámpara que brilla en un lugar oscuro hasta que el Día amanezca y Cristo, la Estrella de la Mañana, brille en el corazón de ustedes.
Apocalipsis 22:16
RVR1960 16 Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias. Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella resplandeciente de la mañana. NTV 16 «Yo, Jesús, he enviado a mi ángel con el fin de darte este mensaje para las iglesias. Yo soy tanto la fuente de David como el heredero de su trono. Yo soy la estrella brillante de la mañana».

¿Qué momento del día se describe simbólicamente como el momento de la redención divina, y por qué?

En los salmos, la mañana es generalmente el momento en que se anhela la redención de Dios. La mañana revela el favor de Dios, que pone fin a la larga noche de desesperación y angustia Salmos 130:5-6
RVR1960 5 Esperé yo a Jehová, esperó mi alma; En su palabra he esperado. 6 Mi alma espera a Jehová Más que los centinelas a la mañana, Más que los vigilantes a la mañana. NTV 5 Yo cuento con el Señor; sí, cuento con él. En su palabra he puesto mi esperanza. 6 Anhelo al Señor más que los centinelas el amanecer, sí, más de lo que los centinelas anhelan el amanecer.
En Salmos 143
RVR1960 Salmo de David. 1 Oh Jehová, oye mi oración, escucha mis ruegos; Respóndeme por tu verdad, por tu justicia. 2 Y no entres en juicio con tu siervo; Porque no se justificará delante de ti ningún ser humano. 3 Porque ha perseguido el enemigo mi alma; Ha postrado en tierra mi vida; Me ha hecho habitar en tinieblas como los ya muertos. 4 Y mi espíritu se angustió dentro de mí; Está desolado mi corazón. 5 Me acordé de los días antiguos; Meditaba en todas tus obras; Reflexionaba en las obras de tus manos. 6 Extendí mis manos a ti, Mi alma a ti como la tierra sedienta. Selah 7 Respóndeme pronto, oh Jehová, porque desmaya mi espíritu; No escondas de mí tu rostro, No venga yo a ser semejante a los que descienden a la sepultura. 8 Hazme oír por la mañana tu misericordia, Porque en ti he confiado; Hazme saber el camino por donde ande, Porque a ti he elevado mi alma. 9 Líbrame de mis enemigos, oh Jehová; En ti me refugio. 10 Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios; Tu buen espíritu me guíe a tierra de rectitud. 11 Por tu nombre, oh Jehová, me vivificarás; Por tu justicia sacarás mi alma de angustia. 12 Y por tu misericordia disiparás a mis enemigos, Y destruirás a todos los adversarios de mi alma, Porque yo soy tu siervo. Salmos 143: 2 : Ro. 3.
20; Gá. 2.
16.
NTV Salmo de David. 1 Oye mi oración, oh Señor; ¡escucha mi ruego! Respóndeme, porque eres fiel y justo. 2 No lleves a juicio a tu siervo, porque ante ti nadie es inocente. 3 El enemigo me ha perseguido; me ha tirado al suelo y me obliga a vivir en la oscuridad como los que están en la tumba. 4 Estoy perdiendo toda esperanza; quedo paralizado de miedo. 5 Recuerdo los días de antaño. Medito en todas tus grandes obras y pienso en lo que has hecho. 6 A ti levanto mis manos en oración; tengo sed de ti como la tierra reseca tiene sed de lluvia. Interludio 7 Ven pronto, Señor, y respóndeme, porque mi abatimiento se profundiza. No te apartes de mí, o moriré. 8 Hazme oír cada mañana acerca de tu amor inagotable, porque en ti confío. Muéstrame por dónde debo andar, porque a ti me entrego. 9 Rescátame de mis enemigos, Señor; corro a ti para que me escondas. 10 Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios. Que tu buen Espíritu me lleve hacia adelante con pasos firmes. 11 Para gloria de tu nombre, oh Señor, preserva mi vida; por tu fidelidad, sácame de esta angustia. 12 En tu amor inagotable, silencia a todos mis enemigos y destruye a todos mis adversarios, porque soy tu siervo.
la liberación de Dios invertirá la oscuridad presente de la muerte Salmos 143:3
RVR1960 3 Porque ha perseguido el enemigo mi alma; Ha postrado en tierra mi vida; Me ha hecho habitar en tinieblas como los ya muertos. NTV 3 El enemigo me ha perseguido; me ha tirado al suelo y me obliga a vivir en la oscuridad como los que están en la tumba.
en la luz de una nueva mañana Salmos 143:8
RVR1960 8 Hazme oír por la mañana tu misericordia, Porque en ti he confiado; Hazme saber el camino por donde ande, Porque a ti he elevado mi alma. NTV 8 Hazme oír cada mañana acerca de tu amor inagotable, porque en ti confío. Muéstrame por dónde debo andar, porque a ti me entrego.
y el estar en la fosa Salmos 143:7
RVR1960 7 Respóndeme pronto, oh Jehová, porque desmaya mi espíritu; No escondas de mí tu rostro, No venga yo a ser semejante a los que descienden a la sepultura. NTV 7 Ven pronto, Señor, y respóndeme, porque mi abatimiento se profundiza. No te apartes de mí, o moriré.
en residir en la “tierra de rectitud” Salmos 143:10
RVR1960 10 Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios; Tu buen espíritu me guíe a tierra de rectitud. NTV 10 Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios. Que tu buen Espíritu me lleve hacia adelante con pasos firmes.

Lee Marcos 16:1-8
RVR1960 (Mt. 28.
1-10; Lc. 24.
1-12; Jn. 20.
1-10) 1 Cuando pasó el día de reposo, María Magdalena, María la madre de Jacobo, y Salomé, compraron especias aromáticas para ir a ungirle. 2 Y muy de mañana, el primer día de la semana, vinieron al sepulcro, ya salido el sol. 3 Pero decían entre sí: ¿Quién nos removerá la piedra de la entrada del sepulcro? 4 Pero cuando miraron, vieron removida la piedra, que era muy grande. 5 Y cuando entraron en el sepulcro, vieron a un joven sentado al lado derecho, cubierto de una larga ropa blanca; y se espantaron. 6 Mas él les dijo: No os asustéis; buscáis a Jesús nazareno, el que fue crucificado; ha resucitado, no está aquí; mirad el lugar en donde le pusieron. 7 Pero id, decid a sus discípulos, y a Pedro, que él va delante de vosotros a Galilea; allí le veréis, como os dijo. 8 Y ellas se fueron huyendo del sepulcro, porque les había tomado temblor y espanto; ni decían nada a nadie, porque tenían miedo.
NTV 1 El sábado al atardecer, cuando terminó el día de descanso, María Magdalena, Salomé y María, la madre de Santiago, fueron a comprar especias para el entierro, a fin de ungir el cuerpo de Jesús. 2 El domingo por la mañana muy temprano, justo al amanecer, fueron a la tumba. 3 En el camino, se preguntaban unas a otras: «¿Quién nos correrá la piedra de la entrada de la tumba? »; 4 pero cuando llegaron, se fijaron y vieron que la piedra, que era muy grande, ya estaba corrida. 5 Cuando entraron en la tumba, vieron a un joven vestido con un manto blanco, sentado al lado derecho. Las mujeres estaban asustadas, 6 pero el ángel les dijo: «No se alarmen. Ustedes buscan a Jesús de Nazaret, el que fue crucificado. ¡No está aquí! ¡Ha resucitado! Miren, aquí es donde pusieron su cuerpo. 7 Ahora vayan y cuéntenles a sus discípulos, incluido Pedro, que Jesús va delante de ustedes a Galilea. Allí lo verán, tal como les dijo antes de morir». 8 Las mujeres, desconcertadas, huyeron temblando de la tumba y no dijeron nada a nadie porque estaban muy asustadas. ----------[ Los manuscritos más antiguos de Marcos terminan en el versículo 16: 8. Otros manuscritos tardíos incluyen uno o ambos de los finales que aparecen a continuación ]. [ Final breve de Marcos ]Luego ellas informaron todo eso a Pedro y a sus compañeros brevemente. Tiempo después, Jesús mismo los envió del oriente al occidente con el sagrado e inagotable mensaje de salvación que da vida eterna. Amén. [ Final largo de Marcos ]

¿Qué sucedió en la mañana de la que se habla aquí, y por qué es tan importante para nosotros?

La mañana de la resurrección de Jesucristo abrió las puertas a la mañana eterna de la salvación de Dios para todos los que creen en su nombre. Los discípulos de Jesús experimentaron toda la fuerza de la promesa de Salmos 30:5
RVR1960 5 Porque un momento será su ira, Pero su favor dura toda la vida. Por la noche durará el lloro, Y a la mañana vendrá la alegría. NTV 5 Pues su ira dura solo un instante, ¡pero su favor perdura toda una vida! El llanto podrá durar toda la noche, pero con la mañana llega la alegría.
: “El llanto puede durar una noche, pero a la mañana viene la alegría”, cuando se encontraron con el Señor resucitado. Únicamente por el favor y el amor incondicional de Dios, nuestro llanto se transforma en alegría Salmos 30:5
RVR1960 5 Porque un momento será su ira, Pero su favor dura toda la vida. Por la noche durará el lloro, Y a la mañana vendrá la alegría. NTV 5 Pues su ira dura solo un instante, ¡pero su favor perdura toda una vida! El llanto podrá durar toda la noche, pero con la mañana llega la alegría.
Salmos 30:7
RVR1960 7 Porque tú, Jehová, con tu favor me afirmaste como monte fuerte. Escondiste tu rostro, fui turbado. NTV 7 Tu favor, oh Señor, me hizo tan firme como una montaña; después te apartaste de mí, y quedé destrozado.

Como la estrella de la mañana anuncia el nacimiento de un nuevo día, así la fe anuncia la nueva realidad de la vida eterna en los hijos de Dios 2 Pedro 1:19
RVR1960 19 Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones; NTV 19 Debido a esa experiencia, ahora confiamos aún más en el mensaje que proclamaron los profetas. Ustedes deben prestar mucha atención a lo que ellos escribieron, porque sus palabras son como una lámpara que brilla en un lugar oscuro hasta que el Día amanezca y Cristo, la Estrella de la Mañana, brille en el corazón de ustedes.
A Jesús se lo llama la estrella resplandeciente de la mañana Apocalipsis 22:16
RVR1960 16 Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias. Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella resplandeciente de la mañana. NTV 16 «Yo, Jesús, he enviado a mi ángel con el fin de darte este mensaje para las iglesias. Yo soy tanto la fuente de David como el heredero de su trono. Yo soy la estrella brillante de la mañana».
a quien esperamos ansiosamente para que establezca su Reino, en el que ya no habrá noche, maldad ni muerte Apocalipsis 21:1-8
RVR1960 1 Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más. 2 Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido. 3 Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios. 4 Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron. 5 Y el que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas. Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas. 6 Y me dijo: Hecho está. Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin. Al que tuviere sed, yo le daré gratuitamente de la fuente del agua de la vida. 7 El que venciere heredará todas las cosas, y yo seré su Dios, y él será mi hijo. 8 Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda. NTV 1 Entonces vi un cielo nuevo y una tierra nueva, porque el primer cielo y la primera tierra habían desaparecido y también el mar. 2 Y vi la ciudad santa, la nueva Jerusalén, que descendía del cielo desde la presencia de Dios, como una novia hermosamente vestida para su esposo. 3 Oí una fuerte voz que salía del trono y decía: «¡Miren, el hogar de Dios ahora está entre su pueblo! Él vivirá con ellos, y ellos serán su pueblo. Dios mismo estará con ellos. 4 Él les secará toda lágrima de los ojos, y no habrá más muerte ni tristeza ni llanto ni dolor. Todas esas cosas ya no existirán más». 5 Y el que estaba sentado en el trono dijo: «¡Miren, hago nuevas todas las cosas! ». Entonces me dijo: «Escribe esto, porque lo que te digo es verdadero y digno de confianza». 6 También dijo: «¡Todo ha terminado! Yo soy el Alfa y la Omega, el Principio y el Fin. A todo el que tenga sed, yo le daré a beber gratuitamente de los manantiales del agua de la vida. 7 Los que salgan vencedores heredarán todas esas bendiciones, y yo seré su Dios, y ellos serán mis hijos. 8 »Pero los cobardes, los incrédulos, los corruptos, los asesinos, los que cometen inmoralidades sexuales, los que practican la brujería, los que rinden culto a ídolos y todos los mentirosos, tendrán su destino en el lago de fuego que arde con azufre. Esta es la segunda muerte».
Apocalipsis 21:25
RVR1960 25 Sus puertas nunca serán cerradas de día, pues allí no habrá noche. NTV 25 Las puertas nunca se cerrarán al terminar el día porque allí no existe la noche.
A fin de cuentas, más que ninguna otra cosa, esto es lo que esperamos cuando hablamos de esperar en el Señor. Y, por cierto, la espera merece la pena.

“Sobre la tumba abierta de José, Cristo había proclamado triunfante: ‘Yo soy la resurrección y la vida’. Únicamente la Deidad podía pronunciar esas palabras. Todos los seres creados viven por la voluntad y el poder de Dios. Son receptores dependientes de la vida de Dios. Desde el más sublime serafín hasta el ser animado más insignificante, todos son abastecidos por la Fuente de vida. Solo el que es uno con Dios podía decir: ‘Tengo poder para poner mi vida, y tengo poder para tomarla de nuevo’. En su divinidad, Cristo poseía el poder para romper las ligaduras de la muerte” (Elena de White, El Deseado de todas las gentes, p. 743).

Se ha dicho que la muerte está grabada en nuestras células desde el nacimiento. Aunque sea cierto, al menos para nosotros, seres caídos, ¿qué nos ha prometido la resurrección de Jesús acerca de la temporalidad de la muerte? ¿Por qué no debemos olvidar nunca lo temporal que es la muerte para nosotros?

VIERNES - Para Estudiar y Meditar

Lee Elena de White, El camino a Cristo, “El secreto del crecimiento”, pp. 99-112.

Los salmos hacen fervientes llamados a esperar en el Señor. “Descansa en el Señor, y espera tranquilo en él” Salmos 37:7
RVR1960 7 Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino, Por el hombre que hace maldades. NTV 7 Quédate quieto en la presencia del Señor, y espera con paciencia a que él actúe. No te inquietes por la gente mala que prospera, ni te preocupes por sus perversas maquinaciones.
Cuando la espera nos parezca agobiante, incierta y solitaria, recordemos a los discípulos el día de la ascensión de Jesús al Cielo Hechos 1:4-11
RVR1960 4 Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de mí. 5 Porque Juan ciertamente bautizó con agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días. 6 Entonces los que se habían reunido le preguntaron, diciendo: Señor, ¿restaurarás el reino a Israel en este tiempo? 7 Y les dijo: No os toca a vosotros saber los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad; 8 pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra. 9 Y habiendo dicho estas cosas, viéndolo ellos, fue alzado, y le recibió una nube que le ocultó de sus ojos. 10 Y estando ellos con los ojos puestos en el cielo, entre tanto que él se iba, he aquí se pusieron junto a ellos dos varones con vestiduras blancas, 11 los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo. NTV 4 Una vez, mientras comía con ellos, les ordenó: «No se vayan de Jerusalén hasta que el Padre les envíe el regalo que les prometió, tal como les dije antes. 5 Juan bautizaba con agua, pero en unos cuantos días ustedes serán bautizados con el Espíritu Santo». 6 Así que mientras los apóstoles estaban con Jesús, le preguntaron con insistencia: — Señor, ¿ha llegado ya el tiempo de que liberes a Israel y restaures nuestro reino? 7 Él les contestó: — Solo el Padre tiene la autoridad para fijar esas fechas y tiempos, y a ustedes no les corresponde saberlo; 8 pero recibirán poder cuando el Espíritu Santo descienda sobre ustedes; y serán mis testigos, y le hablarán a la gente acerca de mí en todas partes: en Jerusalén, por toda Judea, en Samaria y hasta los lugares más lejanos de la tierra. 9 Después de decir esto, Jesús fue levantado en una nube mientras ellos observaban, hasta que ya no pudieron verlo. 10 Mientras se esforzaban por verlo ascender al cielo, dos hombres vestidos con túnicas blancas de repente se pusieron en medio de ellos. 11 «Hombres de Galilea — les dijeron — , ¿por qué están aquí parados, mirando al cielo? Jesús fue tomado de entre ustedes y llevado al cielo, ¡pero un día volverá del cielo de la misma manera en que lo vieron irse! ».
Jesús fue llevado al Cielo ante sus ojos, mientras que ellos quedaron esperando a que regresara en algún día futuro y desconocido. ¿Habrá alguien que haya experimentado un anhelo más intenso de recibir la bendición de Dios que los discípulos en aquel día? Seguramente anhelaban: “Señor, llévanos contigo ahora”. Sin embargo, se les ordenó esperar la promesa del Padre y el regreso de Jesús. Si pensamos que los discípulos estaban llenos de desesperación y decepción, nos sorprenderemos. Regresaron a Jerusalén e hicieron exactamente lo que Jesús les dijo: esperaron el don del Espíritu Santo y luego predicaron el evangelio al mundo con poder Hechos 1:12-14
RVR1960 12 Entonces volvieron a Jerusalén desde el monte que se llama del Olivar, el cual está cerca de Jerusalén, camino de un día de reposo. 13 Y entrados, subieron al aposento alto, donde moraban Pedro y Jacobo, Juan, Andrés, Felipe, Tomás, Bartolomé, Mateo, Jacobo hijo de Alfeo, Simón el Zelote y Judas hermano de Jacobo. 14 Todos estos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con sus hermanos. NTV 12 Después los apóstoles regresaron del monte de los Olivos a Jerusalén, a un kilómetro de distancia. 13 Cuando llegaron, subieron a la habitación de la planta alta de la casa donde se hospedaban. Estos son los nombres de los que estaban presentes: Pedro, Juan, Santiago, Andrés, Felipe, Tomás, Bartolomé, Mateo, Santiago (hijo de Alfeo), Simón (el zelote) y Judas (hijo de Santiago). 14 Todos se reunían y estaban constantemente unidos en oración junto con María la madre de Jesús, varias mujeres más y los hermanos de Jesús.
Hechos 2
RVR1960 1 Cuando llegó el día de Pentecostés, (A) estaban todos unánimes juntos. 2 Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados; 3 y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos. 4 Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen. 5 Moraban entonces en Jerusalén judíos, varones piadosos, de todas las naciones bajo el cielo. 6 Y hecho este estruendo, se juntó la multitud; y estaban confusos, porque cada uno les oía hablar en su propia lengua. 7 Y estaban atónitos y maravillados, diciendo: Mirad, ¿no son galileos todos estos que hablan? 8 ¿Cómo, pues, les oímos nosotros hablar cada uno en nuestra lengua en la que hemos nacido? 9 Partos, medos, elamitas, y los que habitamos en Mesopotamia, en Judea, en Capadocia, en el Ponto y en Asia, 10 en Frigia y Panfilia, en Egipto y en las regiones de África más allá de Cirene, y romanos aquí residentes, tanto judíos como prosélitos, 11 cretenses y árabes, les oímos hablar en nuestras lenguas las maravillas de Dios. 12 Y estaban todos atónitos y perplejos, diciéndose unos a otros: ¿Qué quiere decir esto? 13 Mas otros, burlándose, decían: Están llenos de mosto. 14 Entonces Pedro, poniéndose en pie con los once, alzó la voz y les habló diciendo: Varones judíos, y todos los que habitáis en Jerusalén, esto os sea notorio, y oíd mis palabras. 15 Porque estos no están ebrios, como vosotros suponéis, puesto que es la hora tercera del día. 16 Mas esto es lo dicho por el profeta Joel: 17 Y en los postreros días, dice Dios, Derramaré de mi Espíritu sobre toda carne, Y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán; Vuestros jóvenes verán visiones, Y vuestros ancianos soñarán sueños; 18 Y de cierto sobre mis siervos y sobre mis siervas en aquellos díasDerramaré de mi Espíritu, y profetizarán. 19 Y daré prodigios arriba en el cielo, Y señales abajo en la tierra, Sangre y fuego y vapor de humo; 20 El sol se convertirá en tinieblas, Y la luna en sangre, Antes que venga el día del Señor, Grande y manifiesto; 21 Y todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo. (B) 22 Varones israelitas, oíd estas palabras: Jesús nazareno, varón aprobado por Dios entre vosotros con las maravillas, prodigios y señales que Dios hizo entre vosotros por medio de él, como vosotros mismos sabéis; 23 a este, entregado por el determinado consejo y anticipado conocimiento de Dios, prendisteis y matasteis por manos de inicuos, crucificándole; (C) 24 al cual Dios levantó, (D) sueltos los dolores de la muerte, por cuanto era imposible que fuese retenido por ella. 25 Porque David dice de él: Veía al Señor siempre delante de mí; Porque está a mi diestra, no seré conmovido. 26 Por lo cual mi corazón se alegró, y se gozó mi lengua, Y aun mi carne descansará en esperanza; 27 Porque no dejarás mi alma en el Hades, Ni permitirás que tu Santo vea corrupción. 28 Me hiciste conocer los caminos de la vida; Me llenarás de gozo con tu presencia. (E) 29 Varones hermanos, se os puede decir libremente del patriarca David, que murió y fue sepultado, y su sepulcro está con nosotros hasta el día de hoy. 30 Pero siendo profeta, y sabiendo que con juramento Dios le había jurado que de su descendencia, en cuanto a la carne, levantaría al Cristo para que se sentase en su trono, (F) 31 viéndolo antes, habló de la resurrección de Cristo, que su alma no fue dejada en el Hades, ni su carne vio corrupción. 32 A este Jesús resucitó Dios, de lo cual todos nosotros somos testigos. 33 Así que, exaltado por la diestra de Dios, y habiendo recibido del Padre la promesa del Espíritu Santo, ha derramado esto que vosotros veis y oís. 34 Porque David no subió a los cielos; pero él mismo dice: Dijo el Señor a mi Señor: Siéntate a mi diestra, 35 Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies. (G) 36 Sepa, pues, ciertísimamente toda la casa de Israel, que a este Jesús a quien vosotros crucificasteis, Dios le ha hecho Señor y Cristo. 37 Al oír esto, se compungieron de corazón, y dijeron a Pedro y a los otros apóstoles: Varones hermanos, ¿qué haremos? 38 Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo. 39 Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare. 40 Y con otras muchas palabras testificaba y les exhortaba, diciendo: Sed salvos de esta perversa generación. 41 Así que, los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día como tres mil personas. 42 Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones. 43 Y sobrevino temor a toda persona; y muchas maravillas y señales eran hechas por los apóstoles. 44 Todos los que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas; (H) 45 y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos según la necesidad de cada uno. (I) 46 Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón, 47 alabando a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos. Hechos 2: 1 : Lv. 23.
15-21; Dt. 16.
9-11. Hechos 2: 21 : Jl. 2.
28-32. Hechos 2: 23 : Mt. 27.
35; Mr. 15.
24; Lc. 23.
33; Jn. 19.
18. Hechos 2: 24 : Mt. 28.
5-6; Mr. 16.
6; Lc. 24.
5. Hechos 2: 28 : Sal. 16.
8-11. Hechos 2: 30 : Sal. 89.
3-4; 132.
11. Hechos 2: 35 : Sal. 110.
1. Hechos 2: 44 : Hch. 4.
32-35. Hechos 2: 45 : Mt. 19.
21; Mr. 10.
21; Lc. 12.
33; 18.
22.
NTV 1 El día de Pentecostés, todos los creyentes estaban reunidos en un mismo lugar. 2 De repente, se oyó un ruido desde el cielo parecido al estruendo de un viento fuerte e impetuoso que llenó la casa donde estaban sentados. 3 Luego, algo parecido a unas llamas o lenguas de fuego aparecieron y se posaron sobre cada uno de ellos. 4 Y todos los presentes fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en otros idiomas, conforme el Espíritu Santo les daba esa capacidad. 5 En esa ocasión, había judíos devotos de todas las naciones, que vivían en Jerusalén. 6 Cuando oyeron el fuerte ruido, todos llegaron corriendo y quedaron desconcertados al escuchar sus propios idiomas hablados por los creyentes. 7 Estaban totalmente asombrados. «¿Cómo puede ser? — exclamaban — . Todas estas personas son de Galilea, 8 ¡y aun así las oímos hablar en nuestra lengua materna! 9 Aquí estamos nosotros: partos, medos, elamitas, gente de Mesopotamia, Judea, Capadocia, Ponto, de la provincia de Asia, 10 de Frigia, Panfilia, Egipto y de las áreas de Libia alrededor de Cirene, visitantes de Roma 11 (tanto judíos como convertidos al judaísmo), cretenses y árabes. ¡Y todos oímos a esta gente hablar en nuestro propio idioma acerca de las cosas maravillosas que Dios ha hecho! ». 12 Quedaron allí, maravillados y perplejos. «¿Qué querrá decir esto? », se preguntaban unos a otros. 13 Pero otros entre la multitud se burlaban de ellos diciendo: «Solo están borrachos, eso es todo». 14 Entonces Pedro dio un paso adelante junto con los otros once apóstoles y gritó a la multitud: «¡Escuchen con atención, todos ustedes, compatriotas judíos y residentes de Jerusalén! No se equivoquen. 15 Estas personas no están borrachas, como algunos de ustedes suponen. Las nueve de la mañana es demasiado temprano para emborracharse. 16 No, lo que ustedes ven es lo que el profeta Joel predijo hace mucho tiempo: 17 “En los últimos días — dice Dios — , derramaré mi Espíritu sobre toda la gente. Sus hijos e hijas profetizarán. Sus jóvenes tendrán visiones, y sus ancianos tendrán sueños. 18 En esos días derramaré mi Espíritu aun sobre mis siervos — hombres y mujeres por igual — y profetizarán. 19 Y haré maravillas arriba en los cielos y señales abajo en la tierra: sangre, fuego y nubes de humo. 20 El sol se oscurecerá, y la luna se pondrá roja como la sangre antes de que llegue el grande y glorioso día del Señor. 21 Pero todo el que invoque el nombre del Señor será salvo”. 22 »Pueblo de Israel, ¡escucha! Dios públicamente aprobó a Jesús de Nazaret al hacer milagros poderosos, maravillas y señales por medio de él, como ustedes bien saben; 23 pero Dios sabía lo que iba a suceder y su plan predeterminado se llevó a cabo cuando Jesús fue traicionado. Con la ayuda de gentiles sin ley, ustedes lo clavaron en la cruz y lo mataron; 24 pero Dios lo liberó de los terrores de la muerte y lo volvió a la vida, pues la muerte no pudo retenerlo bajo su dominio. 25 El rey David dijo lo siguiente acerca de él: “Veo que el Señor siempre está conmigo. No seré sacudido, porque él está aquí a mi lado. 26 ¡Con razón mi corazón está contento, y mi lengua grita sus alabanzas! Mi cuerpo descansa en esperanza. 27 Pues tú no dejarás mi alma entre los muertos ni permitirás que tu Santo se pudra en la tumba. 28 Me has mostrado el camino de la vida y me llenarás con la alegría de tu presencia”. 29 »Queridos hermanos, ¡piensen en esto! Pueden estar seguros de que el patriarca David no se refería a sí mismo, porque él murió, fue enterrado y su tumba está todavía aquí entre nosotros; 30 pero él era un profeta y sabía que Dios había prometido mediante un juramento que uno de los propios descendientes de David se sentaría en su trono. 31 David estaba mirando hacia el futuro y hablaba de la resurrección del Mesías. Él decía que Dios no lo dejaría entre los muertos ni permitiría que su cuerpo se pudriera en la tumba. 32 »Dios levantó a Jesús de los muertos y de esto todos nosotros somos testigos. 33 Ahora él ha sido exaltado al lugar de más alto honor en el cielo, a la derecha de Dios. Y el Padre, según lo había prometido, le dio el Espíritu Santo para que lo derramara sobre nosotros, tal como ustedes lo ven y lo oyen hoy. 34 Pues David nunca ascendió al cielo; sin embargo, dijo: “El Señor le dijo a mi Señor: ‘Siéntate en el lugar de honor a mi derecha, 35 hasta que humille a tus enemigos y los ponga por debajo de tus pies’”. 36 »Por lo tanto, que todos en Israel sepan sin lugar a dudas, que a este Jesús, a quien ustedes crucificaron, ¡Dios lo ha hecho tanto Señor como Mesías! ». 37 Las palabras de Pedro traspasaron el corazón de ellos, quienes le dijeron a él y a los demás apóstoles: — Hermanos, ¿qué debemos hacer? 38 Pedro contestó: — Cada uno de ustedes debe arrepentirse de sus pecados y volver a Dios, y ser bautizado en el nombre de Jesucristo para el perdón de sus pecados. Entonces recibirán el regalo del Espíritu Santo. 39 Esta promesa es para ustedes, para sus hijos y para los que están lejos, es decir, para todos los que han sido llamados por el Señor nuestro Dios. 40 Entonces Pedro siguió predicando por largo rato, y les rogaba con insistencia a todos sus oyentes: «¡Sálvense de esta generación perversa! ». 41 Los que creyeron lo que Pedro dijo fueron bautizados y sumados a la iglesia en ese mismo día, como tres mil en total. 42 Todos los creyentes se dedicaban a las enseñanzas de los apóstoles, a la comunión fraternal, a participar juntos en las comidas (entre ellas la Cena del Señor), y a la oración. 43 Un profundo temor reverente vino sobre todos ellos, y los apóstoles realizaban muchas señales milagrosas y maravillas. 44 Todos los creyentes se reunían en un mismo lugar y compartían todo lo que tenían. 45 Vendían sus propiedades y posesiones y compartían el dinero con aquellos en necesidad. 46 Adoraban juntos en el templo cada día, se reunían en casas para la Cena del Señor y compartían sus comidas con gran gozo y generosidad, 47 todo el tiempo alabando a Dios y disfrutando de la buena voluntad de toda la gente. Y cada día el Señor agregaba a esa comunidad cristiana los que iban siendo salvos.

El mandato de nuestro Señor de esperar en él es imposible de cumplir a menos que él haya hecho su obra en nosotros mediante el Espíritu Santo. Ningún entusiasmo humano podrá soportar la tensión que la espera impondrá a nuestro frágil ser. Únicamente una cosa soportará la tensión, y es permanecer en Jesucristo; es decir, cultivar una relación personal con él.

“Si Cristo está en nuestro corazón, inducirá en nosotros ‘el querer como el hacer para que se cumpla su buena voluntad’. Entonces actuaremos como él actuaba y manifestaremos el mismo espíritu. Amán do lo y mo rando en él, ‘creceremos hasta ser en todo como aquel que es la cabeza, es decir, Cristo’. (Elena de White, El camino a Cristo, p. 112).

Al seguir esperando en el Señor, encontraremos paz y satisfacción en los salmos. Nuestras oraciones y cánticos son el lugar donde el corazón de Dios y el nuestro se encuentran diariamente.

PREGUNTAS PARA DIALOGAR:

PREGUNTA 1

¿Por qué es importante la espera en nuestra vida espiritual? Analiza las experiencias de espera de algunos héroes bíblicos de la fe. ¿De qué manera la espera purificó y fortaleció su fe? Romanos 4:19-22
RVR1960 19 Y no se debilitó en la fe al considerar su cuerpo, que estaba ya como muerto (siendo de casi cien años), o la esterilidad de la matriz de Sara. 20 Tampoco dudó, por incredulidad, de la promesa de Dios, sino que se fortaleció en fe, dando gloria a Dios, 21 plenamente convencido de que era también poderoso para hacer todo lo que había prometido; 22 por lo cual también su fe le fue contada por justicia. NTV 19 Y la fe de Abraham no se debilitó a pesar de que él reconocía que, por tener unos cien años de edad, su cuerpo ya estaba muy anciano para tener hijos, igual que el vientre de Sara. 20 Abraham siempre creyó la promesa de Dios sin vacilar. De hecho, su fe se fortaleció aún más y así le dio gloria a Dios. 21 Abraham estaba plenamente convencido de que Dios es poderoso para cumplir todo lo que promete. 22 Y, debido a su fe, Dios lo consideró justo.
Heb 11
RVR1960 1 Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. 2 Porque por ella alcanzaron buen testimonio los antiguos. 3 Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía. 4 Por la fe Abel ofreció a Dios más excelente sacrificio que Caín, por lo cual alcanzó testimonio de que era justo, dando Dios testimonio de sus ofrendas; y muerto, aún habla por ella. 5 Por la fe Enoc fue traspuesto para no ver muerte, y no fue hallado, porque lo traspuso Dios; y antes que fuese traspuesto, tuvo testimonio de haber agradado a Dios. 6 Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan. 7 Por la fe Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aún no se veían, con temor preparó el arca en que su casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo, y fue hecho heredero de la justicia que viene por la fe. 8 Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia; y salió sin saber a dónde iba. 9 Por la fe habitó como extranjero en la tierra prometida como en tierra ajena, morando en tiendas con Isaac y Jacob, coherederos de la misma promesa; 10 porque esperaba la ciudad que tiene fundamentos, cuyo arquitecto y constructor es Dios. 11 Por la fe también la misma Sara, siendo estéril, recibió fuerza para concebir; y dio a luz aun fuera del tiempo de la edad, porque creyó que era fiel quien lo había prometido. 12 Por lo cual también, de uno, y ese ya casi muerto, salieron como las estrellas del cielo en multitud, y como la arena innumerable que está a la orilla del mar. 13 Conforme a la fe murieron todos estos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, y creyéndolo, y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra. 14 Porque los que esto dicen, claramente dan a entender que buscan una patria; 15 pues si hubiesen estado pensando en aquella de donde salieron, ciertamente tenían tiempo de volver. 16 Pero anhelaban una mejor, esto es, celestial; por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos; porque les ha preparado una ciudad. 17 Por la fe Abraham, cuando fue probado, ofreció a Isaac; y el que había recibido las promesas ofrecía su unigénito, 18 habiéndosele dicho: En Isaac te será llamada descendencia; 19 pensando que Dios es poderoso para levantar aun de entre los muertos, de donde, en sentido figurado, también le volvió a recibir. 20 Por la fe bendijo Isaac a Jacob y a Esaú respecto a cosas venideras. 21 Por la fe Jacob, al morir, bendijo a cada uno de los hijos de José, y adoró apoyado sobre el extremo de su bordón. 22 Por la fe José, al morir, mencionó la salida de los hijos de Israel, y dio mandamiento acerca de sus huesos. 23 Por la fe Moisés, cuando nació, fue escondido por sus padres por tres meses, porque le vieron niño hermoso, y no temieron el decreto del rey. 24 Por la fe Moisés, hecho ya grande, rehusó llamarse hijo de la hija de Faraón, 25 escogiendo antes ser maltratado con el pueblo de Dios, que gozar de los deleites temporales del pecado, 26 teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros de los egipcios; porque tenía puesta la mirada en el galardón. 27 Por la fe dejó a Egipto, no temiendo la ira del rey; porque se sostuvo como viendo al Invisible. 28 Por la fe celebró la pascua y la aspersión de la sangre, para que el que destruía a los primogénitos no los tocase a ellos. 29 Por la fe pasaron el Mar Rojo como por tierra seca; e intentando los egipcios hacer lo mismo, fueron ahogados. 30 Por la fe cayeron los muros de Jericó después de rodearlos siete días. 31 Por la fe Rahab la ramera no pereció juntamente con los desobedientes, habiendo recibido a los espías en paz. 32 ¿Y qué más digo? Porque el tiempo me faltaría contando de Gedeón, de Barac, de Sansón, de Jefté, de David, así como de Samuel y de los profetas; 33 que por fe conquistaron reinos, hicieron justicia, alcanzaron promesas, taparon bocas de leones, 34 apagaron fuegos impetuosos, evitaron filo de espada, sacaron fuerzas de debilidad, se hicieron fuertes en batallas, pusieron en fuga ejércitos extranjeros. 35 Las mujeres recibieron sus muertos mediante resurrección; mas otros fueron atormentados, no aceptando el rescate, a fin de obtener mejor resurrección. 36 Otros experimentaron vituperios y azotes, y a más de esto prisiones y cárceles. 37 Fueron apedreados, aserrados, puestos a prueba, muertos a filo de espada; anduvieron de acá para allá cubiertos de pieles de ovejas y de cabras, pobres, angustiados, maltratados; 38 de los cuales el mundo no era digno; errando por los desiertos, por los montes, por las cuevas y por las cavernas de la tierra. 39 Y todos estos, aunque alcanzaron buen testimonio mediante la fe, no recibieron lo prometido; 40 proveyendo Dios alguna cosa mejor para nosotros, para que no fuesen ellos perfeccionados aparte de nosotros. Hebreos 11: 3 : Gn. 1.
1. Hebreos 11: 4 : Gn. 4.
3-10. Hebreos 11: 5 : Gn. 5.
21-24. Hebreos 11: 7 : Gn. 6.
13-22. Hebreos 11: 8 : Gn. 12.
1-5. Hebreos 11: 9 : Gn. 35.
27. Hebreos 11: 11 : Gn. 18.
11-14; 21.
2. Hebreos 11: 12 : Gn. 15.
5. Hebreos 11: 12 : Gn. 22.
17. Hebreos 11: 13 : Gn. 23.
4. Hebreos 11: 17 : Gn. 22.
1-14. Hebreos 11: 18 : Gn. 21.
12. Hebreos 11: 20 : Gn. 27.
27-29,39-40. Hebreos 11: 21 : Gn. 47.
31 — 48.
20. Hebreos 11: 22 : Gn. 50.
24-25; Ex. 13.
19. Hebreos 11: 23 : Ex. 2.
2. Hebreos 11: 23 : Ex. 1.
22. Hebreos 11: 24 : Ex. 2.
10-12. Hebreos 11: 27 : Ex. 2.
15. Hebreos 11: 28 : Ex. 12.
21-30. Hebreos 11: 29 : Ex. 14.
21-31. Hebreos 11: 30 : Jos. 6.
12-21. Hebreos 11: 31 : Jos. 6.
22-25. Hebreos 11: 31 : Jos. 2.
1-21. Hebreos 11: 32 : Jue. 6.
11 — 8.
32. Hebreos 11: 32 : Jue. 4.
6 — 5.
31. Hebreos 11: 32 : Jue. 13.
2 — 16.
31. Hebreos 11: 32 : Jue. 11.
1 — 12.
7. Hebreos 11: 32 : 1 S. 16.
1 — 1 R. 2.
11. Hebreos 11: 32 : 1 S. 1.
1 — 25.
1. Hebreos 11: 33 : Dn. 6.
1-27. Hebreos 11: 34 : Dn. 3.
1-30. Hebreos 11: 35 : 1 R. 17.
17-24; 2 R. 4.
25-37. Hebreos 11: 36 : 1 R. 22.
26-27; 2 Cr. 18.
25-26; Jer. 20.
2; 37.
15; 38.
6. Hebreos 11: 37 : 2 Cr. 24.
21.
NTV 1 La fe demuestra la realidad de lo que esperamos; es la evidencia de las cosas que no podemos ver. 2 Por su fe, la gente de antaño gozó de una buena reputación. 3 Por la fe entendemos que todo el universo fue formado por orden de Dios, de modo que lo que ahora vemos no vino de cosas visibles. 4 Fue por la fe que Abel presentó a Dios una ofrenda más aceptable que la que presentó Caín. La ofrenda de Abel demostró que era un hombre justo, y Dios aprobó sus ofrendas. Aunque Abel murió hace mucho tiempo, todavía nos habla por su ejemplo de fe. 5 Fue por la fe que Enoc ascendió al cielo sin morir; «desapareció, porque Dios se lo llevó». Pues antes de ser llevado, lo conocían como una persona que agradaba a Dios. 6 De hecho, sin fe es imposible agradar a Dios. Todo el que desee acercarse a Dios debe creer que él existe y que él recompensa a los que lo buscan con sinceridad. 7 Fue por la fe que Noé construyó un barco grande para salvar a su familia del diluvio en obediencia a Dios, quien le advirtió de cosas que nunca antes habían sucedido. Por su fe, Noé condenó al resto del mundo y recibió la justicia que viene por la fe. 8 Fue por la fe que Abraham obedeció cuando Dios lo llamó para que dejara su tierra y fuera a otra que él le daría por herencia. Se fue sin saber adónde iba. 9 Incluso cuando llegó a la tierra que Dios le había prometido, vivió allí por fe, pues era como un extranjero que vive en carpas. Lo mismo hicieron Isaac y Jacob, quienes heredaron la misma promesa. 10 Abraham esperaba con confianza una ciudad de cimientos eternos, una ciudad diseñada y construida por Dios. 11 Fue por la fe que hasta Sara pudo tener un hijo, a pesar de ser estéril y demasiado anciana. Ella creyó que Dios cumpliría su promesa. 12 Así que una nación entera provino de este solo hombre, quien estaba casi muerto en cuanto a tener hijos; una nación con tantos habitantes que, como las estrellas de los cielos y la arena de la orilla del mar, es imposible contar. 13 Todas estas personas murieron aún creyendo lo que Dios les había prometido. Y aunque no recibieron lo prometido, lo vieron desde lejos y lo aceptaron con gusto. Coincidieron en que eran extranjeros y nómadas aquí en este mundo. 14 Es obvio que quienes se expresan así esperan tener su propio país. 15 Si hubieran añorado el país del que salieron, bien podrían haber regresado. 16 Sin embargo, buscaban un lugar mejor, una patria celestial. Por eso, Dios no se avergüenza de ser llamado el Dios de ellos, pues les ha preparado una ciudad. 17 Fue por la fe que Abraham ofreció a Isaac en sacrificio cuando Dios lo puso a prueba. Abraham, quien había recibido las promesas de Dios, estuvo dispuesto a sacrificar a su único hijo, Isaac, 18 aun cuando Dios le había dicho: «Isaac es el hijo mediante el cual procederán tus descendientes». 19 Abraham llegó a la conclusión de que si Isaac moría, Dios tenía el poder para volverlo a la vida; y en cierto sentido, Abraham recibió de vuelta a su hijo de entre los muertos. 20 Fue por la fe que Isaac prometió a sus hijos, Jacob y Esaú, bendiciones para el futuro. 21 Fue por la fe que Jacob, cuando ya era anciano y estaba por morir, bendijo a cada uno de los hijos de José y se inclinó para adorar, apoyado en su vara. 22 Fue por la fe que José, cuando iba a morir, declaró con confianza que el pueblo de Israel saldría de Egipto. Incluso les mandó que se llevaran sus huesos cuando ellos salieran. 23 Fue por la fe que cuando nació Moisés, sus padres lo escondieron durante tres meses. Vieron que Dios les había dado un hijo fuera de lo común y no tuvieron temor de desobedecer la orden del rey. 24 Fue por la fe que Moisés, cuando ya fue adulto, rehusó llamarse hijo de la hija del faraón. 25 Prefirió ser maltratado con el pueblo de Dios a disfrutar de los placeres momentáneos del pecado. 26 Consideró que era mejor sufrir por causa de Cristo que poseer los tesoros de Egipto, pues tenía la mirada puesta en la gran recompensa que recibiría. 27 Fue por la fe que Moisés salió de la tierra de Egipto sin temer el enojo del rey. Siguió firme en su camino porque tenía los ojos puestos en el Invisible. 28 Fue por la fe que Moisés ordenó que el pueblo de Israel celebrara la Pascua y rociara con sangre los marcos de las puertas para que el ángel de la muerte no matara a ninguno de sus primeros hijos varones. 29 Fue por la fe que el pueblo de Israel atravesó el mar Rojo como si estuviera pisando tierra seca, pero cuando los egipcios intentaron seguirlos, murieron todos ahogados. 30 Fue por la fe que el pueblo de Israel marchó alrededor de Jericó durante siete días, y las murallas se derrumbaron. 31 Fue por la fe que Rahab, la prostituta, no fue destruida junto con los habitantes de su ciudad que se negaron a obedecer a Dios. Pues ella había recibido en paz a los espías. 32 ¿Cuánto más les tengo que decir? Se necesitaría demasiado tiempo para contarles acerca de la fe de Gedeón, Barac, Sansón, Jefté, David, Samuel y todos los profetas. 33 Por la fe esas personas conquistaron reinos, gobernaron con justicia y recibieron lo que Dios les había prometido. Cerraron bocas de leones, 34 apagaron llamas de fuego y escaparon de morir a filo de espada. Su debilidad se convirtió en fortaleza. Llegaron a ser poderosos en batalla e hicieron huir a ejércitos enteros. 35 Hubo mujeres que recibieron otra vez con vida a sus seres queridos que habían muerto. Sin embargo, otros fueron torturados, porque rechazaron negar a Dios a cambio de la libertad. Ellos pusieron su esperanza en una vida mejor que viene después de la resurrección. 36 Algunos fueron ridiculizados y sus espaldas fueron laceradas con látigos; otros fueron encadenados en prisiones. 37 Algunos murieron apedreados, a otros los cortaron por la mitad con una sierra y a otros los mataron a espada. Algunos anduvieron vestidos con pieles de ovejas y cabras, desposeídos y oprimidos y maltratados. 38 Este mundo no era digno de ellos. Vagaron por desiertos y montañas, se escondieron en cuevas y hoyos de la tierra. 39 Debido a su fe, todas esas personas gozaron de una buena reputación, aunque ninguno recibió todo lo que Dios le había prometido. 40 Pues Dios tenía preparado algo mejor para nosotros, de modo que ellos no llegaran a la perfección sin nosotros.

PREGUNTA 2

¿Cuál es el fin de nuestra espera? Salmos 37:34-40
RVR1960 34 Espera en Jehová, y guarda su camino, Y él te exaltará para heredar la tierra; Cuando sean destruidos los pecadores, lo verás. 35 Vi yo al impío sumamente enaltecido, Y que se extendía como laurel verde. 36 Pero él pasó, y he aquí ya no estaba; Lo busqué, y no fue hallado. 37 Considera al íntegro, y mira al justo; Porque hay un final dichoso para el hombre de paz. 38 Mas los transgresores serán todos a una destruidos; La posteridad de los impíos será extinguida. 39 Pero la salvación de los justos es de Jehová, Y él es su fortaleza en el tiempo de la angustia. 40 Jehová los ayudará y los librará; Los libertará de los impíos, y los salvará, Por cuanto en él esperaron. NTV 34 Pon tu esperanza en el Señor y marcha con paso firme por su camino. Él te honrará al darte la tierra y verás destruidos a los perversos. 35 He visto a gente malvada y despiadada florecer como árboles en tierra fértil. 36 Pero cuando volví a mirar, ¡habían desaparecido! ¡Aunque los busqué, no pude encontrarlos! 37 Miren a los que son buenos y honestos, porque a los que aman la paz les espera un futuro maravilloso. 38 Pero los rebeldes serán destruidos; para ellos no hay futuro. 39 El Señor rescata a los justos; él es su fortaleza en tiempos de dificultad. 40 El Señor los ayuda; los rescata de los malvados. Él salva a los justos, y ellos encuentran refugio en él.
Es decir, ¿qué se nos promete cuando todo esté finalmente resuelto? ¿Qué esperanza encontramos en estos pasajes, por ejemplo, acerca de la justicia, que hace tanto tiempo que falta en esta vida?

PREGUNTA 3

En cuanto a la condición de los muertos según la Biblia Ecleciastes 9:5 ¿por qué falta poco para que vuelvan a la vida? ¿Qué esperanza podemos extraer de la respuesta?

Repaso de la Lección

LECCIONES DE VIDA - Pr. Robert Costa

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