Introducción:

Desde su fundación en el siglo XIX, la Iglesia Adventista del Séptimo Día ha sostenido la convicción de ser el remanente profético descrito en la Biblia. Este estudio se sumerge en la perspectiva adventista del Séptimo Día para examinar los fundamentos bíblicos y las enseñanzas de Elena de White que respaldan esta creencia. A través de un análisis de pasajes clave en Apocalipsis y otros libros, junto con el aporte profético de Elena de White, buscamos entender por qué la iglesia afirma su identidad como el remanente de Dios en los últimos tiempos.

Exploraremos cómo la Iglesia Adventista del Séptimo Día ve su misión de proclamar el evangelio eterno, mantener la fidelidad a los mandamientos de Dios y vivir en la esperanza del pronto retorno de Jesucristo. En este estudio, buscamos una comprensión más profunda de la identidad y el propósito de la Iglesia Adventista del Séptimo Día como el remanente escogido para proclamar un mensaje de esperanza y salvación en un mundo necesitado.

1. La Iglesia Remanente en Guerra

Apocalipsis 12:17

RVR1960 ¹⁷ Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo. NTV ¹⁷ Así que el dragón se enfureció contra la mujer y le declaró la guerra al resto de sus hijos, a todos los que obedecen los mandamientos de Dios y se mantienen firmes en su testimonio de Jesús.

Explicación: Este versículo señala que el remanente de la iglesia se caracterizará por dos aspectos fundamentales: guardar los mandamientos de Dios y tener el testimonio de Jesucristo. La Iglesia Adventista del Séptimo Día sostiene que se cumple con estas características, al observar los Diez Mandamientos, incluido el cuarto mandamiento del sábado, y al considerar a los escritos de Elena de White como el testimonio del Espíritu de Profecía que apunta a Jesucristo.

Comentario de Elena de White:"La iglesia remanente es un pueblo designado por Dios, sellado en su frente con el sello del Dios viviente. Son los que en medio de la apostasía religiosa se levantan de manera valiente y firme, defendiendo la verdadera fe. Son los que son leales a los mandamientos de Dios y tienen la fe de Jesús. 'Aquí está la paciencia de los santos; aquí están los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús' Apocalipsis 14:12

RVR1960 ¹² Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús. NTV ¹² Esto significa que el pueblo de Dios tiene que soportar la persecución con paciencia, obedeciendo sus mandamientos y manteniendo la fe en Jesús.
El mundo y la iglesia están unidos en tratar de hacer callar a los que proclaman la verdad, pero estos fieles testigos no se callarán ni serán silenciados. Su voz se escuchará dando el último llamado de misericordia a un mundo caído" (Joyas de los testimonios, tomo 2, p. 283).

2. El Evangelio Eterno al Mundo

Apocalipsis 14:6-7

RVR1960 ⁶ Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo, ⁷ diciendo a gran voz: Temed a Dios, y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado; y adorad a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas. NTV ⁶ Y vi a otro ángel, que volaba por el cielo y llevaba la eterna Buena Noticia para proclamarla a los que pertenecen a este mundo: a todo pueblo y toda nación, tribu y lengua. ⁷ «Teman a Dios — gritaba — . Denle gloria a él, porque ha llegado el tiempo en que ocupe su lugar como juez. Adoren al que hizo los cielos, la tierra, el mar y todos los manantiales de agua».

Explicación: La Iglesia Adventista del Séptimo Día considera que este mensaje del primer ángel está conectado con su misión de predicar el evangelio eterno al mundo y enfatizar la adoración al Creador, tal como se refleja en el cuarto mandamiento del sábado.

Comentario de Elena de White: "El mensaje del ángel de Apocalipsis 14:6-12

RVR1960 ⁶ Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo, ⁷ diciendo a gran voz: Temed a Dios, y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado; y adorad a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas. ⁸ Otro ángel le siguió, diciendo: Ha caído, ha caído Babilonia, la gran ciudad, porque ha hecho beber a todas las naciones del vino del furor de su fornicación. ⁹ Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca en su frente o en su mano, ¹⁰ él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero; ¹¹ y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre. ¹² Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús. NTV ⁶ Y vi a otro ángel, que volaba por el cielo y llevaba la eterna Buena Noticia para proclamarla a los que pertenecen a este mundo: a todo pueblo y toda nación, tribu y lengua. ⁷ «Teman a Dios — gritaba — . Denle gloria a él, porque ha llegado el tiempo en que ocupe su lugar como juez. Adoren al que hizo los cielos, la tierra, el mar y todos los manantiales de agua». ⁸ Luego otro ángel lo siguió por el cielo mientras gritaba: «Babilonia ha caído — cayó esa gran ciudad — porque hizo que todas las naciones del mundo bebieran el vino de su apasionada inmoralidad». ⁹ Después un tercer ángel los siguió mientras gritaba: «Todo el que adore a la bestia y a su estatua o acepte su marca en la frente o en la mano ¹⁰ tendrá que beber el vino de la ira de Dios, que se ha servido sin diluir en la copa del furor de Dios. Ellos serán atormentados con fuego y azufre ardiente en presencia de los ángeles santos y del Cordero. ¹¹ El humo de su tormento subirá por siempre jamás, y no tendrán alivio ni de día ni de noche, porque adoraron a la bestia y a su estatua y aceptaron la marca de su nombre». ¹² Esto significa que el pueblo de Dios tiene que soportar la persecución con paciencia, obedeciendo sus mandamientos y manteniendo la fe en Jesús.
, anunciado al mundo en alta voz, es el mensaje de Dios para este tiempo" (Consejos sobre la salud, p. 463).

3. La Paciencia de los Santos

Versículo: Apocalipsis 14:12

RVR1960 ¹² Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús. NTV ¹² Esto significa que el pueblo de Dios tiene que soportar la persecución con paciencia, obedeciendo sus mandamientos y manteniendo la fe en Jesús.

Explicación: Nuevamente, se hace hincapié en que el remanente de la iglesia mantendrá la fe en Jesús y seguirá guardando los mandamientos de Dios, incluido el sábado.

Comentario de Elena de White: "La fe de Jesús es el mensaje que debemos proclamar al mundo" (Consejos para la iglesia, p. 91).

4. El Testimonio de Jesús

Versículo: Apocalipsis 19:10

RVR1960 ¹⁰ Yo me postré a sus pies para adorarle. Y él me dijo: Mira, no lo hagas; yo soy consiervo tuyo, y de tus hermanos que retienen el testimonio de Jesús. Adora a Dios; porque el testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía. NTV ¹⁰ Entonces me postré a sus pies para adorarlo, pero me dijo: «No, no me adores a mí. Yo soy un siervo de Dios, como tú y tus hermanos que dan testimonio de su fe en Jesús. Adora únicamente a Dios, porque la esencia de la profecía es dar un claro testimonio de Jesús».
(primera parte)

Explicación: El versículo subraya que el testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía, resaltando la importancia de la revelación divina en la vida de los creyentes y la guía profética para el remanente de la iglesia.

Comentario de Elena de White: "Dios tiene un pueblo sobre la tierra que mantiene la Biblia y la Biblia sola, como la regla de todas las doctrinas y la base de todas las reformas" (El conflicto de los siglos, p. 45).

5. La Protección y Sustento en el Desierto

Apocalipsis 12:14

RVR1960 ¹⁴ Y se le dieron a la mujer las dos alas de la gran águila, para que volase de delante de la serpiente al desierto, a su lugar, donde es sustentada por un tiempo, y tiempos, y la mitad de un tiempo. NTV ¹⁴ pero a ella se le dieron dos alas como las de una gran águila para que pudiera volar al lugar que se había preparado para ella en el desierto. Allí sería cuidada y protegida lejos del dragón durante un tiempo, tiempos y la mitad de un tiempo.

Explicación: La Iglesia Adventista del Séptimo Día ve en este pasaje un período de protección y sustento especial durante el tiempo del fin, que se identifica con el movimiento adventista.

Comentario de Elena de White: "El Señor ha declarado que la historia del pasado será una advertencia para el futuro; que no habrá ningún cambio en el futuro, excepto para que las escenas se repitan con mayor poder. Necesitamos el espíritu y la influencia del trabajo del tercer ángel" (Joyas de los testimonios, tomo 2, p. 33).

6. La Gran Comisión Mundial

Mateo 28:19-20

RVR1960 ¹⁹ Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; ²⁰ enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén. NTV ¹⁹ Por lo tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. ²⁰ Enseñen a los nuevos discípulos a obedecer todos los mandatos que les he dado. Y tengan por seguro esto: que estoy con ustedes siempre, hasta el fin de los tiempos».

Explicación: La Iglesia Adventista del Séptimo Día destaca la importancia de cumplir la comisión dada por Jesús de hacer discípulos y enseñar a guardar todas las cosas que Él ha mandado, lo que incluye los mandamientos y el sábado.

Comentario de Elena de White: "Los miembros de la iglesia deben ser trabajadores inteligentes, fieles y perseverantes. Deben estudiar las Escrituras con oración ferviente, recibiendo del tesoro de la Palabra de Dios su mensaje para el mundo" (Joyas de los testimonios, tomo 2, p. 329).

NOTA:

La Iglesia Adventista del Séptimo Día se considera a sí misma como la iglesia remanente de la profecía bíblica. Basándose en varios pasajes de Apocalipsis y otros libros bíblicos, así como en las enseñanzas de Elena de White, la iglesia afirma cumplir con las características del remanente: guardar los mandamientos de Dios, incluido el sábado, y mantener el testimonio de Jesucristo. Además, enfatiza su misión de predicar el evangelio eterno al mundo, destacando la adoración al Creador y proclamando un mensaje de advertencia para el tiempo del fin. La iglesia remanente es vista como un pueblo escogido por Dios para proclamar su verdad y misericordia a un mundo caído.