“Acuérdate del sábado para santificarlo. Seis días trabajarás y harás toda tu obra, pero el séptimo día es de reposo para Jehová, tu Dios”.
Éxodo 28:8-10
RVR1960
8 Y su cinto de obra primorosa que estará sobre él, será de la misma obra, parte del mismo; de oro, azul, púrpura, carmesí y lino torcido.
9 Y tomarás dos piedras de ónice, y grabarás en ellas los nombres de los hijos de Israel;
10 seis de sus nombres en una piedra, y los otros seis nombres en la otra piedra, conforme al orden de nacimiento de ellos.
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8 La faja decorativa estará confeccionada con los mismos materiales: lino de tejido fino, bordado con oro y con hilo azul, púrpura y escarlata.
9 »Toma dos piedras de ónice y graba sobre ellas los nombres de las tribus de Israel:
10 seis nombres en cada piedra, dispuestos según el orden de nacimiento de los hijos de Israel.
El séptimo día de la semana es el Sábado. Es un día creado por Dios para que lo adoremos y lo recordemos como Creador y redentor nuestro.
Un día que fue apartado, bendecido, y santificado por Dios mismo.
El Sábado es el sello del Dios vivo y corona de Su creación como dice Su Palabra. Deleitate en Dios y disfruta de Su santo día y serás bendecido y prosperado en todo.