“No hay para mí mayor alegría que saber que mis hijos viven de acuerdo con la verdad”.
3 Juan 1:4
RVR1960
4 No tengo yo mayor gozo que este, el oír que mis hijos andan en la verdad.
NTV
4 No hay nada que me cause más alegría que oír que mis hijos siguen la verdad.
Desde muy pequeños les enseñas a tus hijos a andar por caminos de rectitud. Los enfocas a amar a Dios y a que obedezcan sus preceptos. Al pasar los años la alegría mayor es que ellos permanezcan en la verdad.
Cuando no es esa la realidad lo que te queda es orar porque de rodillas hablaras más fuerte que con palabras.
Confía en el poder de la oración y deja al Señor actuar.