“¿Por qué voy a inquietarme?
¿Por qué me voy a angustiar?
En Dios pondré mi esperanza,
y todavía lo alabaré.
¡Él es mi Salvador y mi Dios!”
Salmos 42:11
RVR1960
11 ¿Por qué te abates, oh alma mía, Y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de alabarle, Salvación mía y Dios mío.
NTV
11 ¿Por qué estoy desanimado? ¿Por qué está tan triste mi corazón? ¡Pondré mi esperanza en Dios! Nuevamente lo alabaré, ¡mi Salvador y mi Dios!
Cuando pones tu esperanza y tu confianza en Dios, no estarás angustiado ni desesperado por la situación que estás viviendo, porque Dios está al tanto de tus problemas aún cuando creas que no está trabajando.
Recordar que quien lleva tus problemas es Aquel que lo sabe hacer mejor que tú, te dará descanso. Alaba a Dios aún en tus momentos difíciles y pon en Él tu confianza .